En un giro inesperado durante los Juegos Olímpicos de París 2024, Luana Alonso, nadadora e influencer paraguaya, fue expulsada de la Villa Olímpica. La decisión se tomó después de que anunciara su retirada del deporte, generando controversia y un supuesto ambiente disruptivo dentro del equipo.
La jefa de la Misión del Comité Olímpico Paraguayo, Larissa Schaerer, explicó que Alonso, de 20 años, había decidido abandonar la natación justo después de competir en los 100 metros estilo mariposa, donde terminó sexta. Aunque aclaró que su decisión no fue impulsada por los resultados en los juegos, su anuncio en redes sociales y la subsiguiente decisión de alojarse fuera de la Villa Olímpica complicaron las cosas.
Luana Alonso, en París 2024. Instagram
“Su presencia está creando un ambiente inadecuado en el seno del Team Paraguay”, señaló Schaerer en el documento formal que solicitaba a Alonso abandonar la Villa de Atletas el 28 de julio. El conflicto escaló cuando Alonso fue vista en la villa después de haberse mudado a un hotel, supuestamente visitando a un compañero para entregarle unos auriculares.
Schaerer subrayó que la atleta ya no formaba parte de la delegación oficial y, por lo tanto, no tenía permitido estar en las instalaciones olímpicas. Además, mencionó que Alonso había descuidado sus entrenamientos y no cumplió con los compromisos esperados, lo que había generado inconvenientes en la preparación del equipo.
Este incidente marca un abrupto final a la carrera olímpica de Alonso, quien había sido una figura prominente en la natación paraguaya. Su retiro y la posterior expulsión han dejado un sabor amargo en un evento que buscaba celebrar el espíritu deportivo y la camaradería internacional.