¿Sentiste el temblor?, no. ¡Ah!, pensé que había temblado la tierra. ¿Cómo qué no?, claro que tembló, lo que pasa es que no fue fuerte. Esta conversación se dio recientemente entre tres compañeros de labores ante un temblor de poca magnitud, de los 80 que se produjeron en el país de primero al 13 de agosto.
Y es que la República Dominicana es una zona altamente sísmica, que en lo que va de año ha tenido 1,240 temblores, según explicó el maestro Juan Arias Fuentes, supervisor de la sección de análisis de datos sísmicos del Centro Nacional de Sismología de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).
“Tenemos mil 240 sismos y eso quiere decir que somos una zona altamente sísmicas, gracias a Dios que los eventos no son fuertes, sino eventos desde 1, 2, 3 grado, lo más fuertes han sido 5.0; 5.2, 5.3… Son, como decimos, benignos que no hacen daños a las propiedades. La mayoría no se sienten” señaló.
Al preguntarle si esto es bueno o malo, el maestro Arias Fuentes dijo que “para nosotros (República Dominicana) es bueno porque la tierra va liberando energía poco a poco, no es igual que se descargue de golpe con un sismo de 6,7, 8 grados”.
Recomienda crear conciencia
El experto recomienda a la población crear conciencia de la sismicidad que hay en la isla y prepararse, porque puede ocurrir un sismo de gran magnitud y sorprendernos en el trabajo, en la calle, en su casa y a los niños en la escuela.
“Los sismos no s se predicen, pero sí, hay fuentes sísmicas que son las fallas geológicas y las placas tectónicas y como ya tenemos eso determinado sabemos que los sismos pueden ocurrir y que en cualquier sitio de nuestro país puede ocurrir un sismo de cierta magnitud” puntualizó
Refirió en hay 14 fallas, pero tres o cuatro que son las principales, como la falla de la cordillera Septentrional, La Trinchera de los Muertos y la placa tectónica que viene desde Norteamérica y que se va introduciendo por debajo de la isla y eso va produciendo movimientos sísmicos.
Otras fallas son las del Camú, Ocoa, Bonao, El Seibo. “Son muchísimas fallas y ya tenemos eso determinado, sabemos dónde pude ocurrir un sismo. Lo que hay es que prepararse para si nos llega, que quiera Dios que no sea así, si nos llega un evento como ya lo hemos tenido en 1946, precisamente un 4 de agosto, estemos preparados para eso. Ese sismo fue de 8.1 grado y ocasionó un tsunami en Nagua, Matancita”.
Recordó que para ese tiempo era reducida la población y se calculan que murieron entre tres mil a cinco mil personas, pero en esa zona ahora vive una población extraordinaria.
Los sismos de este mes
Las sacudidas de tierra en los primeros 13 días de agosto fueron 80, el de menor intensidad fue de 2.6 grados y el de mayor de 3.7.
El día primero se produjeron cinco temblores; el dos hubo 6; el día 4 tembló 9 veces, el 6 se registraron 5; el día 7 fue de mucho movimientos y ocurrieron 12; el día 8 al igual que el 9 tembló seis veces, el día 10 no se reportó movimiento sísmico, pero 11 tembló siete veces; el 12 once veces y el día 13 tembló 13 veces.
Estos movimientos tuvieron epicentro en distintas zonas como al noroeste de Miches,; Los Cacaos en San Cristóbal; al noroeste de Constanza en La Vega; en Pedernales; en Jimaní; La Descubierta, al Oeste de Luperón, en el Océano Atlántico; al sureste de Punta Cana, en el Canal de la Mona, en Las Galeras, Océano Atlántico, al oeste de Pedro Santana, Haití; Arenoso, provincia Duarte; Yamasá, Monte Plata; Los Llanos en San Pedro de Macorís , Baní, Peravia, Palmar de Ocoa y otros.