La radiación solar es el principal factor de riesgo implicado en la aparición del cáncer de piel (melanomas y carcinomas cutáneos). Para prevenir el daño cutáneo que produce el sol, el uso de la crema solar es clave siempre que se haga de la forma correcta, es decir, escogiendo el factor de protección correspondiente a nuestro fototipo de piel y aplicando la cantidad necesaria para garantizar que estamos protegidos.
Y es que, “más del 50% de las zonas del cuerpo quedan desprotegidas ya que la cantidad que se aplica no es suficiente”, advierte María Vitale, dermatóloga y directora médica de Cantabria Labs, responsable de dar a conocer el estudio Buenos hábitos al sol, que anualmente elabora el laboratorio y que analiza la situación de la protección solar en España.
El informe pretende arrojar cifras que sirvan para entender cuál es el comportamiento y hábitos de los españoles al sol con el fin de conocer cómo mejorar y hacia dónde dirigir las campañas de concienciación, así como escuchar las necesidades y cuidar de la salud de las personas al aire libre. Han participado más de 4.800 personas y de ellas más de 3.400 han sido de jóvenes menores de 25 años.
Tal y como recuerda la experta, “la cantidad que se debe aplicar en cada parte del cuerpo debe ser de 2 mgr por centímetro cuadrado y nunca menos”. Esta cantidad, asegura la dermatóloga, “es la que determina la eficacia del factor de protección solar del producto que utilizamos”.
Si no se cumple con esta cantidad, advierte, “la protección no llegará a lo que expone el producto por lo que el riesgo de daño solar será mayor”. A esto hay que añadir que “la eficacia también se compromete con el uso de toallas, con la arena de la playa o la sudoración, por lo que es fundamental ser generosos con la cantidad aplicada para garantizar la seguridad”.
Los jóvenes saben que el moreno ya no es tendencia
Si bien aún un gran porcentaje de jóvenes sigue asociando el moreno como algo bueno y bello, este porcentaje ha disminuido y cada vez más jóvenes asocian el bronceado como un posible daño en la piel. “No sabemos si este dato positivo es el resultado de campañas de concienciación más efectivas o que la sociedad en general empieza a hacerse eco de la necesidad de cuidarse de los efectos nocivos del sol, seguramente sea la combinación de ambos”, explica la dermatóloga.
Coincidiendo con estos datos positivos, este informe señala que el uso de SPF 50 o más entre los jóvenes ya es algo más extendido, incrementándose en casi un 10% respecto a años anteriores. Además, en el mismo porcentaje también y lo usan todo el año, no solo en vacaciones o en momentos puntuales.
Si hubiera que sacar, por el contrario, líneas de trabajo sobre cómo seguir mejorando las campañas de concienciación, Vitale comenta: “Tenemos que ser conscientes de que las encuestas nos dicen también en qué aspectos hay que hacer hincapié. Un aspecto que nos llama la atención es que casi el 65% de los encuestados desconoce los efectos que la luz azul puede tener sobre la piel. En este sentido y dada la importancia de este tema al pasar muchas horas expuestos a este tipo de luz emitida por dispositivos móviles, ordenadores, tabletas, televisión, entre otros, tendremos que informar de manera particular y resaltar qué medidas protectoras podemos recomendar”.
Otro dato negativo es que los jóvenes no conocen las reglas para detectar el cáncer de piel a través de los lunares y no se realizan controles dermatológicos para evitar un problema en el futuro.
Se trata de la regla de ABCDE:
A) Lesiones con Asimetría.
B) Bordes irregulares.
C) Distintos Colores en la misma lesión.
D) Diámetro superior a 6mm.
E) Evolución rápida.
“Más del 60% de los encuestados desconoce esta regla”, asegura la experta.
¿Cómo elegimos los fotoprotectores?
Entre los jóvenes la respuesta más generalizada es la misma. “uso la crema que me compra mi madre”, así que también es en parte la responsable de que los jóvenes se protejan mejor ya que como hemos visto en la encuesta, el 75% de las mujeres mayores de 31 años utilizan SPF 50 o más y el 50% lo utiliza todo el año. Pero ¿qué más tienen en cuenta para elegir la crema solar? La recomendación del farmacéutico y después la marca.