El papa Francisco volvió a referirse al conflicto en Israel y llamó a una jornada de ayuno, penitencia y oración por la paz, el próximo viernes 27 de octubre.
“Invito a que se unan a ella las diversas confesiones cristianas, quienes pertenecen a otras religiones y cuantos se preocupan por la causa de la paz en el mundo”, agregó el Sumo Pontífice en el mensaje publicado en su cuenta de X.
Ese viernes, en la plaza de San Pedro tendrá lugar una oración de una hora destinada a pedir la paz en el mundo y el cese de los conflictos. Allí instará a los creyentes a que apoyen “sólo a un bando en este conflicto, el de la paz, no con palabras, sino con la oración, con la implicación total”.
Francisco mencionó que le “inquieta la ampliación del conflicto” entre Israel y Hamas, y se refirió puntualmente a la situación de los civiles en Gaza, por lo que pidió aumentar los esfuerzos para evitar una “catástrofe humanitaria”.
“Pienso en Palestina e Israel, las víctimas aumentan y la situación en Gaza es desesperada. Por favor, hágase todo lo posible para evitar una catástrofe humanitaria”, dijo e insistió en su pedido “encarecido” para que “los niños, los enfermos, los ancianos, las mujeres y todos los civiles no sean víctimas del conflicto” y se garantice “el derecho humanitario” allí.
“Callen las armas y escuchen el grito de los pobres, de la gente, de los niños”, agregó.
En su anterior llamamiento, durante el ángelus del domingo, el Papa había insistido a las partes que trabajen por el establecimiento de corredores humanitarios en la Franja de Gaza, así como para la liberación de los rehenes en manos de Hamas.
Si bien sobre lo último no han habido avances, Israel confirmó en las últimas horas que permitirá la entrada de envíos con alimentos, agua y medicamentos a Gaza, provenientes de Egipto. Según informaron, hay decenas de contenedores listos para ingresar en el territorio, a la espera de la luz verde.
La noticia se conoció tras el encuentro que mantuvieron Benjamin Netanyahu y Joe Biden en Israel, y estará acompañada de un fondo de ayuda que Washington destinará a Gaza y la Cisjordania ocupada, por unos USD 100 millones.
También, el secretario del Estado vaticano, el cardenal italiano Pietro Parolin, había ofrecido días atrás la mediación de la Santa Sede en el conflicto y hasta se reunió con los embajadores israelí y palestino en los últimos días.
“La Santa Sede está, como siempre, dispuesta a cualquier mediación necesaria” para alcanzar la paz y evitar la muerte de más civiles inocentes por estas ofensivas “inhumanas”, sostuvo.
A la par del conflicto en Israel, Francisco habló de la guerra que aún se desarrolla en Ucrania y se mostró preocupado por los “tantos frentes abiertos en el mundo”.
Es por ello que enfatizó en que “la guerra no soluciona ningún problema” y, por el contrario “sólo siembra muerte y destrucción, y el odio aumenta y multiplica la venganza”.
“El drama continúa” y “la guerra borra el futuro, el porvenir… cancela el futuro”, lamentó. “Sigamos rezando por la paz, no olvidemos a la martirizada Ucrania, de la que ahora no se habla”, concluyó.
(Con información de EFE y AFP)
