Cirujano francés acusado en el mayor escándalo de abuso infantil en Francia
Un cirujano francés está en el centro de una investigación por presunto abuso sexual de cientos de menores, en lo que podría convertirse en el mayor caso de pedofilia en la historia de Francia. Joël Le Scouarnec, de 66 años y especialista en cirugía abdominal, es sospechoso de haber agredido a aproximadamente 250 niños durante más de tres décadas, incluso mientras las víctimas estaban bajo anestesia.
Según la revista L’Express, este escándalo podría ser el caso más grave de delincuencia infantil registrado en Francia.
Antecedentes y primeras acusaciones contra Joël Le Scouarnec
Las primeras sospechas sobre la conducta inapropiada de Le Scouarnec surgieron hace 14 años, cuando fue declarado culpable de poseer imágenes relacionadas con abuso sexual infantil. Sin embargo, a pesar de esta condena, el cirujano continuó ejerciendo su profesión hasta su detención en 2017.
El arresto se produjo tras una exhaustiva investigación policial iniciada por denuncias de violación contra dos niñas de apenas cuatro y seis años. Aunque Le Scouarnec niega haberlas agredido sexualmente, admite una “conducta desviada” con ellas, según declaraciones de su abogado.
“La perversión es enorme”: hallazgos durante la investigación
Durante la pesquisa, los agentes encontraron el diario personal del médico, en el que supuestamente detalla sus agresiones sexuales contra menores en los hospitales donde trabajaba. Francesca Satta, abogada de una de las víctimas, comentó: “Al abrir el diario, volví a cerrarlo de inmediato, la perversión es enorme”.
Los fiscales de La Rochelle, ciudad ubicada al oeste de Francia, indican que Le Scouarnec habría cometido estos abusos desde 1989 hasta su arresto. Además, los investigadores comenzaron a contactar a pacientes mencionados en el diario, muchos de los cuales no eran conscientes de haber sido víctimas.
El juicio y las declaraciones del acusado
El cirujano, que será juzgado este invierno, ha reconocido haber agredido sexualmente a algunos pacientes, pero niega los hechos específicos descritos en su diario personal.
Según su abogado, Thibault Kurzawa, “afirma que esos escritos son ficciones basadas en sus fantasías, por muy nauseabundas que sean”. También admite que su comportamiento fue inapropiado y señaló que “es casi un alivio para él haber sido arrestado porque estaba en una espiral de la que no podía salir”.
Este caso ha conmocionado a Francia y pone en evidencia la necesidad de reforzar los controles en el ámbito médico para evitar futuros abusos.
Artículo publicado originalmente en RT.

