Bartolo García
Santiago, RD. – Francisco Domínguez Brito, ex Procurador General de la República y destacado dirigente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), instó este miércoles a convertir la reciente aprobación del nuevo Código Penal en una oportunidad histórica para lanzar una segunda gran ola de reforma judicial en el país.
Durante sus declaraciones, Domínguez Brito lamentó que el sistema de justicia actual esté plagado de lentitud, costos elevados y una excesiva carga burocrática que aleja a los ciudadanos del acceso real a sus derechos. “La justicia en República Dominicana sigue siendo lenta, cara y excesivamente formalista. Muchas veces, la verdad de los hechos se pierde entre papeles y procedimientos interminables”, expresó.
Según el exprocurador, la nueva legislación penal debe servir como punto de partida para transformar la justicia en un servicio más humano y cercano, que piense primero en la gente antes que en las estructuras.
Entre sus propuestas, Domínguez Brito planteó la eliminación de trabas innecesarias y formalismos obsoletos, junto al fortalecimiento de mecanismos alternativos como los actos notariales para resolver conflictos sin la necesidad de llegar a juicio.
El también exsenador de Santiago sugirió además la desjudicialización de procesos civiles que pueden resolverse sin la intervención de los tribunales, citando el divorcio como ejemplo. “No todo debe pasar por un juez. Hay procesos que pueden gestionarse con responsabilidad y legalidad sin congestionar los tribunales”, afirmó.
En materia penal, propuso fortalecer el rol del juez en el análisis del fondo de los casos, restándole importancia a la forma y simplificando los procesos para hacerlos más eficaces. Esto incluiría eliminar la figura del juez de la instrucción en la etapa de audiencia preliminar y envío a juicio.
Otra de sus sugerencias fue permitir que casos con alto impacto económico sobre los ciudadanos puedan avanzar hacia juicio sin depender exclusivamente del Ministerio Público. “Cuando el patrimonio de un ciudadano está en juego, no debería estar atado a una opinión externa para buscar justicia”, dijo.
Domínguez Brito recalcó que sus planteamientos son parte de una visión abierta a debate, y no recetas definitivas. “No vengo con verdades absolutas, sino con el ánimo de iniciar un diálogo nacional en favor de una justicia más funcional y justa”.
Asimismo, hizo un llamado a unir a todos los actores del sistema judicial y de la sociedad civil en una mesa común de diálogo y construcción. “Jueces, fiscales, abogados, notarios, organizaciones sociales y la academia deben sentarse a definir juntos qué justicia queremos y cómo hacerla realidad”, manifestó.
El exprocurador resaltó que el acceso a la justicia no debe seguir siendo un privilegio de quienes tienen recursos, sino un derecho real y asequible para todos los ciudadanos. “Debemos dejar de ver la justicia como un lujo y convertirla en lo que siempre debió ser: un servicio público eficiente y accesible”.
También enfatizó que esta transformación no puede postergarse. “Es el momento adecuado. Tenemos una reforma penal reciente, una sociedad cada vez más demandante, y un contexto institucional que exige transparencia y eficacia”.
Francisco Domínguez Brito concluyó sus palabras invitando a toda la ciudadanía a involucrarse en esta discusión, reiterando que la justicia debe construirse desde y para la gente. “La confianza en la justicia se gana con hechos, no con promesas”, puntualizó.
El dirigente político ha sido una de las voces más persistentes en el país en torno a temas de institucionalidad, Estado de derecho y fortalecimiento del sistema judicial, y con estas propuestas vuelve a colocarse en el centro del debate nacional sobre justicia.