La directiva provisional de la filial en esta ciudad del Colegio de Abogados de la República Dominicana (CARD) que regirá hasta 2024 fue juramentada anoche en un acto celebrado en la sede consulado general, encabezado por el cónsul general Eligio Jáquez, con la participación de docenas de juristas que se han integrado a la entidad.
En el discurso central Jáquez dio la bienvenida a los miembros y felicitó a los directivos juramentados resaltando el aporte de los abogados dominicanos radicados en Nueva York, la gran mayoría sin poder ejercer la profesión por las trabas del idioma y las barreras académicas que los obligan a estudiar otra vez y hacer la reválida debido a que el sistema judicial se rige por el código mientras en República Dominicana es el código francés.
Dijo que el CARD es una de las organizaciones que se crearon para llenar de satisfacción al pueblo dominicano.
“Aquí estamos nosotros a unos días de celebrar la restauración de la República Dominicana y no queda otra cosa sino retomar el principio del resurgimiento de nuestra nación para ratificar al mundo que había un país libre y soberano que se levantaba de sus cenizas”, agregó el cónsul.
Jáquez señaló que muchas cosas han ocurrido desde entonces, como el esfuerzo de sus hombres y mujeres para darle al mundo un país que tiene muchas características sobresalientes y que llenan de orgullo a todos los dominicanos.
“Estamos aquí para darle cuerpo a la organización de los abogados en la ciudad de Nueva York”, explicó.
“Cuando se constituye el CARD yo me imagino lo fácil que les será a los demás profesionales y ciudadanos caminar con la profesión, el apoyo y la fortaleza con la que debe sentirse uno amparado por los hombres y mujeres del derecho en el CARD”, dijo Jáquez.
Dijo que además del CARD, en el consulado durante su gestión se han recibido la UASD, INTRANT, el IMPOSDOM, esperando que delegaciones del colegio de abogados al consulado para mantener las buenas relaciones.
Exhortó a los abogados a participar activamente en los trabajos del CARD en Nueva York y votar en la asamblea que elegirá a la directiva formal que regirá por un período de tres años a partir de noviembre 2021.
“No hay que salir del territorio para uno darse cuenta, pero desde fuera también uno comienza a valorar y a aquilatar los atributos que adornan la dominicanidad”, expresó.
Jáquez citó como ejemplo el Salón de la Fama del béisbol en Cooperstown (Nueva York), donde hay tres dominicanos, la mayor cantidad de peloteros latinos de las Grandes Ligas porque otros países tienen uno o dos, pero no tres.
“Son centenares de países y que haya allí tres dominicanos, nos llena de orgullo y en los próximos años tendremos más dominicanos. Y así pasa con nuestra música que también recorre el mundo”, añadió.
Juramentación
Los miembros de la directiva fueron juramentados por el doctor Deomedes E. Olivares Rosario debido a que el presidente nacional del CARD Miguel Surun Hernández, no pudo estar presente en la ceremonia, pero envió una carta autorizando a que la juramentación la hiciera en su representación.
La directiva está encabezada por el licenciado Cristino Guerra, presidente, Virgen Rodríguez en actas y correspondencias, Ivelisse Lesczynski, secretaria de equidad de género, Sara Machado en relaciones inter institucionales, Eustaquia Sánchez en educación, Emma Roa en protocolo, Mayra Sánchez, asuntos sociales, Ramón Ortiz en organización, Johnny Piñeiro, tesorero y coordinador en Long Island, Francisco de León, prensa y comunicaciones, Moisés Sánchez M., coordinador en Brooklyn, Cleotildo Polanco, coordinador en Queens, Cristhian de Aza, coordinador en El Bronx y como vocales, Francisco Sandoval, Remulus Della Valle M., Ángel Ferrera y Carlos Silver, quien además es coordinador en Manhattan.
El acto se inició con las notas de los himnos de República Dominicana y el doctor Efigenio Jáquez Cruz, hermano del cónsul, hizo la invocación religiosa.
Al juramentar a la directiva, Olivares Rosario los exhortó a trabajar sin descanso para convertir a la seccional del CARD en una institución al servicio de los mejores intereses de la diáspora dominicana en Nueva York y Estados Unidos.
Por Miguel Cruz Tejada