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Detalles del incidente
Al menos 17 personas, incluyendo ocho menores de edad, perdieron la vida en el Club Social El Paraíso, ubicado al oeste de Caracas, tras la detonación de una bomba de gas lacrimógeno durante una fiesta para recaudar fondos de graduación. El evento estaba abarrotado de adolescentes y fue organizado por varias unidades educativas. El lugar, conocido como Club de los Cotorros, era frecuentado por la comunidad ecuatoriana en el país.
Desencadenante del incidente
La tragedia se desencadenó durante una discusión personal entre dos asistentes a la fiesta, alrededor de la 1 de la madrugada. La liberación del gas provocó pánico entre las aproximadamente 500 personas presentes en la sala, resultando en casos de asfixia y una estampida violenta debido al miedo. Numerosas personas resultaron heridas por politraumatismos y fueron trasladadas a hospitales cercanos como el Hospital Pérez Carreño, la Clínica El Paraíso y la Clínica Loira.
Acciones tomadas por las autoridades
El Ministro de Interior y Justicia, Néstor Reverol, informó que siete personas, incluyendo dos menores de edad, fueron detenidas como presuntos responsables de la explosión de la bomba de gas lacrimógeno. El Cuerpo de Investigaciones Penales, Científicas y Criminalísticas (CICPC) junto a la Guardia Nacional Bolivariana coordinaron el traslado de las víctimas a centros médicos.
Identificación de las víctimas
Entre los fallecidos se encuentran Jorhgen Alexander Castro (19), Adrián Alejandro Blanco (16), Luis Roniel Guerra Alfonso (19), Marcos Javier Altuve Valenzuela (18) y Luis Eduardo Barrios Cevedo (46), según la Policía Nacional Bolivariana.
Contexto de corrupción y tráfico de armas
En Venezuela, la corrupción en los cuerpos policiales ha propiciado un tráfico de armas de fuego y bombas lacrimógenas, que han terminado en manos de civiles en áreas populares y marginales de la ciudad. Los Colectivos, grupos civiles armados de carácter paramilitar respaldados por el gobierno chavista, han sido vistos utilizando y activando bombas lacrimógenas para reprimir protestas, resolver conflictos o enfrentar manifestaciones opositoras.