Los estadounidenses vieron más contenido a través de plataformas de streaming que por televisión por cable en julio, un hito para la televisión en continuo que es la primera vez que consigue más vistas que la televisión tradicional, según anunció Nielsen.
La televisión en continuo capturó el 34,8 % del tiempo total de visualización de televisión de EEUU durante el mes de julio, mientras que la TV por cable atrajo el 34,4 %, según la empresa especializada en medición de audiencias.
El tiempo total que los estadounidenses dedicaron a estas nuevas maneras de ver la televisión aumentó un 22,6 % con respecto al año anterior, mientras que el tiempo de visualización por cable disminuyó un 8,9 %.
Netflix fue el servicio de streaming más visto el mes pasado, impulsado por su serie “Stranger Things”, seguido de YouTube.
Por su parte, las series más populares de Hulu fueron “Only Murders in the Building” (Solo asesinatos en el edificio) y “The Bear”, mientras que las de Prime Video de Amazon fueron la nueva serie “The Terminal List” (La lista terminal o La lista final) y los nuevos episodios de “The Boys”.
Durante los meses estivales, al no haber clases, los niños suelen pasar más tiempo consumiendo contenido, lo que podría haber aumentado el tiempo que pasan en YouTube y otras plataformas de transmisión en julio.
También, cuando no hay olimpiadas, suele haber una escasez de grandes eventos deportivos en los meses de verano y el deporte es un gran diferenciador de la televisión por cable.
En el desglose de ese 34,8% del consumo de streaming en julio, el 8% miró Netflix, el 7,3% YouTube, el 3,6% Hulu, el 3% Prime Video, el 1,8% Disney y el 1% HBO Max. El restante 10,2% usó otras plataformas.
Los datos consignados dan continuidad lógica a las tendencias que se observan en Estados Unidos desde hace varios años. Por un lado, la caída sostenida de abonados a televisión por cable, una cifra que en apenas una década se ha reducido de más de 100 millones de hogares a alrededor de 70; y por el otro, el auge del streaming con servicios que resultan mucho más baratos que una suscripción al cable y que en el segundo trimestre del año ya alcanzaban los 113 millones de hogares.