Ozzy Osbourne hizo una insólita revelación: dijo que decidió dejar de tomar ácido un día en que mantuvo una conversación de una hora con un caballo.
Fue tras una gira en los setenta. El líder de Black Sabbath se había tomado “10 tabletas de ácido” antes de salir a caminar por el campo.
“Solía tragarme puñados de pastillas a la vez. El final llegó cuando volvimos a Inglaterra. Tomé 10 tabletas de ácido y luego salí a caminar por el campo. Terminé quedándome allí hablando con este caballo durante aproximadamente una hora. Al final, el caballo se dio la vuelta y me dijo que me fuera a la mierda”, confesó el músico al Daily Star.
En ese momento, Ozzy pensó: “Suficiente para mi”. Y prometió no drogarse nunca más de esa manera.
En aquella época, Osbourne no se rehusaba a las “costumbres” estadounidenses: “En ese momento en Estados Unidos a la gente le gustaba mucho mezclar sus bebidas con ácido. A mi no me importaba”.
Su amigo e integrante de Black Sabbath Geezer Butler confirmó a Classic Rock que la banda ingresó en el mundo de las drogas cuando estaban trabajando en su cuarto disco en Los Ángeles.
Habían ido a la casa de unas jóvenes en California. Ellas les convidaron psilocibina y los músicos británicos no dudaron en aceptar el regalo.
“Simplemente lo tomé, yo, Ozzy y estas chicas. Ozzy fue a nadar en el océano, al menos eso pensó, pero todavía estaba en la playa, agitándose en la arena”, reveló Butler.
Su estado de salud
Ozzy fue operado a mediados de junio en un hospital de Los Ángeles. El 16 de ese mes se lo vio saliendo de la clínica en silla de ruedas, jogging negro y camisa de mangas largas.