Sabemos que consumir mucha azúcar no es lo más recomendable y también que los refrescos son una de las formas en que más la ingerimos, así que es válido indagar si existe alguna de estas bebidas que no tuviera tanta azúcar.
Historia burbujeante
Los refrescos, sodas o gaseosas son bebidas hechas a partir de agua carbonatada y algún edulcorante: una sustancia que endulza; además de otros ingredientes como saborizantes y colorantes.
Aunque podríamos pensar que su existencia es reciente, en realidad su historia se remonta varios siglos atrás. Sabemos que en la Edad Media ya existían las bebidas no alcohólicas, saborizadas y endulzadas, que llegaron a Europa por la influencia árabe.
La palabra jarabe, viene del árabe bebida, que se usaba para describirlas en general o las que contenían jugos de frutas y se endulzaban con miel.
Pero los antecedentes de los refrescos modernos se los debemos al químico inglés, del siglo XVIII, Joseph Priestley que diseñó un sistema para carbonatar el agua y hacer soda.
El agua carbonatada es una mezcla de agua líquida y dióxido de carbono gaseoso, hasta antes de Priestley para hacer bebidas carbonatadas se usaba agua mineral de manantial, que de manera natural tiene dióxido de carbono.
Un poco de azúcar
Los refrescos actuales contienen una gran cantidad de azúcar y tenemos muchas evidencias de los problemas de salud asociados a un alto consumo de esta: empezando por las caries dentales, pasando por la obesidad y la diabetes.
Dependiendo de la marca y la formulación, los refrescos sí pueden contener azúcar de caña, es decir sacarosa, pero muchos de ellos se endulzan con jarabes, como el de alta fructosa, que se obtiene del maíz.
Esto es un problema añadido: hay estudios que muestran que consumir grandes cantidades de jarabe de maíz se asocia con mayor riesgo enfermedades del corazón.
¿Hay algún refresco que tenga menos azúcar?
La respuesta corta a eso es: sí. La respuesta larga es: sí, pero no hay mucha diferencia entre unos y otros.
Considerando una presentación de 600 mL, que es bastante común, las cantidades van de 29 hasta 45 gramos. En cucharadas de azúcar eso va de las 3 hasta 5 cucharadas.
Otra forma de verlo es que si tomas una botella completa de la bebida con más azúcar es como si te comieras un paquete completo con seis galletas de chispas de chocolate, y si tomas el refresco con menos azúcar, es como si comieras solo la mitad del paquete.
No hay nada de malo en comer unas galletas de vez en cuando, o tomar un vaso de refresco, pero la mejor forma de reducir tu consumo de azúcar será sin duda, evitar estos alimentos y bebidas, porque sí, todos los refrescos tienen mucha azúcar.