Alarmantes cifras de feminicidios en Argentina
Informe del Observatorio “Ni Una Menos”
Tabla de contenido
En el año 2017, al menos 298 mujeres fueron asesinadas en Argentina, lo que representa un feminicidio cada 29 horas. Según el Observatorio del movimiento “Ni Una Menos”, se registraron 13 feminicidios en la primera quincena de este año. De estos casos, 47 fueron feminicidios “vinculados”, afectando tanto a mujeres y niñas como a hombres y niños.
Análisis de Mujeres de la Matria Latinoamericana (MuMaLá)
El informe realizado por la organización MuMaLá, basado en el análisis de medios gráficos y digitales de todo el país, también revela la existencia de seis travesticidios. La falta de presupuesto destinado a combatir la violencia machista es una de las principales preocupaciones, ya que durante 2017 se invirtió menos del 0,05 % del total del presupuesto nacional para este fin.
Desafíos y falta de prioridad política
Según Raquel Vivanco, coordinadora de MuMaLá y presidenta del observatorio, las cifras de feminicidios reflejan la falta de prioridad política del Gobierno de Mauricio Macri en la lucha contra la violencia machista. La ausencia de una partida presupuestaria específica para este fin en 2018 es una muestra de esta falta de compromiso.
Violencia doméstica y desprotección estatal
El informe destaca que el 90 % de los feminicidios fueron cometidos por hombres del círculo íntimo de la víctima, y el 65 % de ellos ocurrieron en la vivienda de la mujer. Solo el 4 % de los feminicidios fueron cometidos por extraños, lo que pone de manifiesto la prevalencia de la violencia doméstica en Argentina.
Llamado a la acción y críticas al Estado
Raquel Vivanco denuncia la falta de garantías para la erradicación de la violencia contra las mujeres, a pesar de la existencia de una ley al respecto desde 2009. La falta de patrocinio jurídico gratuito especializado para las víctimas y la ausencia de campañas de sensibilización son solo algunos de los incumplimientos del Estado en este ámbito.
Propuestas de solución
Ante esta situación, se plantea la necesidad de una “ley de emergencia contra la violencia hacia las mujeres” y la implementación de un plan de acción con resultados medibles a corto plazo. A pesar de los anuncios realizados por el Gobierno, se critica la falta de soluciones concretas y efectivas para abordar esta problemática.