Donald Trump afirmó que podría postular a un tercer período como presidente de los Estados Unidos en caso de ganar las elecciones de noviembre, bajo el argumento de que su campaña de 2016 fue espiada y eso lo haría merecedor de una excepción.
En un discurso proselitista ante un grupo de simpatizantes en Oshkosh, expresó: “En 78 días vamos a detener a la izquierda radical, vamos a ganar el estado de Wisconsin y vamos a ganar por otros cuatro años”.
Mientras una multitud coreaba “cuatro años más”, típico canto de los presidentes que postulan a un segundo período, Trump añadió: “Y después de eso, iremos por otros cuatro años. Porque espiaron mi campaña, deberíamos recibir un nuevo plazo de cuatro años”.
La afirmación es controversial porque la 22 Enmienda de la Constitución indica que ninguna persona puede ser elegida como presidente más de dos veces, sin dar lugar a casos excepcionales.
Sobre el argumento expresado, en 2019, el director del FBI, Chris Wray, quien fue designado por el propio Trump, declaró que la vigilancia que realizó la agencia no constituye un espionaje ilegal, ya que las acciones fueron autorizadas por la justicia en vista de los posibles vínculos entre miembros del equipo con agentes rusos, lo que fue investigado como un posible ataque extranjero sobre el proceso electoral.
El líder republicano inició este lunes una gira por varias ciudades del país, buscando contrarrestar la atención mediática de la Convención Demócrata en la que su rival, Joe Biden, será formalizado como el candidato opositor.
Durante sus discursos, Trump repitió su mensaje de “ley y orden”, una campaña atípica para un candidato que ya está en el cargo. En sus críticas al ex vicepresidente, lo llamó “un títere de los extremistas izquierdistas” y dijo que una parte de los manifestantes opositores “son fascistas”.
Wisconsin es uno de los llamados “swing states”, estados cuya contienda no está definida y pueden inclinar la balanza en el conteo del colegio electoral en noviembre. Las últimas encuestas arrojan una ligera ventaja favorable a Biden, apenas por encima del margen de error. El escenario es similar en Minnesota, otra de las paradas de Trump en la jornada.