El sismo de magnitud 7,2 se produjo al noreste de Saint-Louis du Sud, en el sur del país y se sintió en todo el Caribe. El primer ministro haitiano Ariel Henry declaró el estado de emergencia por un mes y llamó a la nación a “mostrar solidaridad” y no entrar en pánico
Un terremoto de magnitud 7,2 sacudió Haití este sábado, dejando al menos 304 muertos y derrumbes de edificaciones en este país caribeño que aún no se recupera del devastador sismo de 2010, y que padece una severa crisis política y social.
El sismo, que hizo temblar las casas y obligó a la población a buscar protección, se produjo hacia las 08:30 locales (12:30 GMT) y tuvo su epicentro a unos 160 km de la capital haitiana, Puerto Príncipe, según del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
También hay “cientos de heridos y desaparecidos” por el terremoto, informó la agencia de Protección Civil del país caribeño.
Haití declaró el estado de emergencia en respuesta a la catástrofe y el presidente estadounidense, Joe Biden, aprobó ayuda “inmediata” para el país caribeño. “Estoy entristecido por el sismo devastador” en Haití, afirmó Biden en un comunicado, subrayando la implementación de “una respuesta inmediata de Estados Unidos” para evaluar los daños y asistir a los heridos.
Parte del mar comienza a ingresar a Haití
— RT en Español (@ActualidadRT) August 14, 2021
Emiten alerta de tsunami por el terremoto de magnitud 7,2 registrado cerca de la costa de Haití. pic.twitter.com/4K1pqHpIHn
Los habitantes compartieron imágenes en redes sociales que muestran los desesperados esfuerzos para sacar a gente de los escombros de los edificios derrumbados, mientras personas gritaban tratando de encontrar un lugar seguro fuera de sus casas.
“El gobierno decidió esta mañana declarar el estado de emergencia por un mes tras el desastre”, dijo el primer ministro de Haití, Ariel Henry, al tiempo que llamaba a la nación a “mostrar solidaridad” y no entrar en pánico.
El primer ministro añadió que visitará las zonas afectadas en las próximas horas junto a otras autoridades.
La larga sacudida inicial se sintió en gran parte del Caribe, incluso en Santiago de Cuba (a unos 300 km de Saint-Louis-du-Sud), donde muchos residentes salieron de sus hogares, según Radio Rebelde.
El USGS emitió inicialmente una alerta de tsunami, previendo posibles olas de hasta tres metros a lo largo de la costa de Haití, pero poco después la levantó.
Los daños en la ciudad de Les Cayes parecen ser importantes, incluyendo el derrumbe de un hotel de varios pisos.
Los residentes compartieron imágenes en las redes sociales de las ruinas de edificios de hormigón, incluida una iglesia en la que aparentemente se estaba celebrando una ceremonia el sábado en la ciudad suroccidental de Les Anglais.
“Mi solidaridad y la de todo el pueblo español con Haití por el grave terremoto que ha sufrido (…) Contáis con el apoyo de España para salir adelante tras este terrible suceso”, dijo el presidente del gobierno de España, Pedro Sánchez, en Twitter.
También llegaron saludos solidarios desde la vecina República Dominicana y Cuba, entre otros países.
– Una tragedia tras otra –
Un terremoto de magnitud 7 en enero de 2010 dejó gran parte de Puerto Príncipe y las ciudades cercanas en ruinas polvorientas. Causó la muerte de más de 200.000 personas y dejó otras 300.000 heridas.
Más de un millón y medio de haitianos se quedaron sin hogar, dejando a las autoridades de la isla y a la comunidad humanitaria internacional ante un reto colosal en un país que carece de un registro de tierras y de códigos de construcción.
Ese terremoto destruyó cientos de miles de viviendas, al igual que edificios administrativos y escuelas, así como el 60% del sistema sanitario de Haití.
La reconstrucción del principal hospital del país sigue incompleta, y las organizaciones no gubernamentales se han esforzado por suplir las numerosas deficiencias del Estado.
El terremoto de este sábado se produce poco más de un mes después de que el presidente Jovenel Moise fuera asesinado en su casa por un comando armado, lo que conmocionó a un país que ya lucha contra la pobreza, una creciente violencia de las bandas criminales y la pandemia de covid-19.
El juez de instrucción designado el lunes para dirigir la investigación judicial sobre el magnicidio de Moise anunció el viernes que abandonaba el caso. La policía dice que ha detenido a 44 personas en relación con el asesinato, incluidos 12 policías haitianos, 18 colombianos que supuestamente formaban parte del comando y dos estadounidenses de origen haitiano.
El jefe de seguridad de Moise se encuentra entre los detenidos en relación con el complot supuestamente organizado por un grupo de haitianos con vínculos en el extranjero. La policía ha emitido avisos de búsqueda de otras personas, entre ellas un juez de la Corte Suprema de Haití, un exsenador y un empresario.
Por Amelie Baron (AFP)