Miguel Cruz Tejada
NUEVA YORK._ Una jueza de la Corte Suprema Estatal en El Bronx sentenció al dominicano Christopher Canó de 30 años de edad quien se declaró culpable de actuar como un sicario para matar por encargo al entonces presidente de ese condado, Rubén Díaz Junior (Rubencito) mientras participaba en la Gran Parada Dominicana el 24 de julio 2016.
Canó, que residía en Florida y vino a Nueva York a ejecutar el encargo también fue condenado por violar un recluso en la ducha de la prisión, intento de violación sexual criminal a otros reclusos en la cárcel donde está confinado después de ser arrestado el mismo día del desfile en la avenida Grand Concourse en El Bronx.
La magistrada Shari Michels, lo confinó a siete años de prisión y cinco años de supervisión posterior a la liberación por posesión criminal en segundo grado de un arma; 3 años y medio de prisión y cinco años de supervisión posterior a la liberación por intento de violación en el primer grado, y 3 años y medio de prisión y cinco años de supervisión posterior a la liberación por intento de delincuencia acto Sexual en primer grado, condenas que sumadas le dan 23 años en total.
Canó debe cumplir las sentencias simultáneamente. El acusado se declaró culpable de los cargos el 4 de diciembre 2023.
La oficina de la fiscal del distrito de El Bronx, Darcel Clark dijo en un comunicado que Canó intentó violar sexualmente a reclusos en la cárcel de Rikers Island donde estaba recluido hasta su sentencia en la corte.
“El acusado fue sorprendido en la calle con un arma ilegal, representando una amenaza para la multitud reunida para un desfile, y luego cometió actos horrendos contra reclusos mientras estuvo encarcelado. Se ha declarado culpable de tres acusaciones. Esta pena de prisión mantendrá a un acusado peligroso alejado de la comunidad”, añade el comunicado.
Según la investigación, el 24 de julio de 2016, el acusado fue visto en Gran Parada Dominicana de El Bronx en la avenida Grand Concourse con una pistola en la cintura.
La policía fue notificada, siguió al acusado y lo detuvo. Al ser interrogado dijo que tenía una bomba en su zapato.
Fue arrestado inmediatamente y se encontró que estaba en posesión de una pistola calibre .38 cargada.
También declaró que le pagaron $5.000 dólares para matar al entonces presidente del condado de El Bronx quien estuvo presente en el desfile.
El 19 de octubre 2020, mientras se encontraba recluido en el Centro Rose M. Singer Center de la referida cárcel, Canó entró al área de duchas donde estaba la víctima y lo violó.