El coordinador de Tabaco de la División de Enfermedades no Transmisibles del Ministerio de Salud Pública, el Dr. Bruno Calderón, se negó a ofrecer información al comunicador Juandy Gómez acerca de las políticas que implementa ese Ministerio sobre la reducción de consumo y promoción del tabaco en la República Dominicana.
El Dr. Calderón dijo que a pesar de ser el encargado del Departamento que tiene que velar por las políticas antitabaquismo, no puede dar respuesta a las tres interrogantes que se les plantearon sobre esta materia debido a que debía consultarlo con su superior.
La consulta versaba sobre tres pilares esenciales: “¿Qué está haciendo el Ministerio de Salud en materia de prevención de tabaco en niños y adolescentes? ¿Qué política de reducción de consumo de tabaco a nivel poblacional está llevando a cabo? ¿Qué planes tiene el Ministerio a corto, mediano y largo plazo sobre el tema del tabaco?
El conductor del programa “Diario de Salud”, que se difunde de lunes a viernes a través de Poder 98.7 F.M, criticó que no es posible que un tema que debe manejar al dedillo el incumbente debido a que ha estado en esa división en otros periodos y existen leyes y regulaciones que trazan la línea a seguir sobre esta temática.
El también locutor y periodista lamentó que, aunque se han logrado algunos avances, todavía en el país el libre acceso a la información pública no es tan libre: está cargado de obstáculos y este caso demuestra que hasta en esto hay una burocracia que atenta contra lo que establece la Constitución y la Ley de Libre Acceso a la Información Pública 200-04.
Dijo que, aunque República Dominicana no forma parte del Convenio Marco de la Organización Mundial de la Salud para el Control del Tabaco, sin embargo, está obligada por otros acuerdos que ha suscrito sobre el control de enfermedades no transmisibles y reducción de consumo de tabaco.
Entiende que debe ser prioridad de esta institución vigilar el consumo de tabaco y las medidas de prevención; proteger a la población del humo de tabaco; ofrecer ayuda para el abandono del tabaco; advertir de los peligros del tabaco; hacer cumplir las prohibiciones sobre publicidad, promoción y patrocinio; y aumentar los impuestos al tabaco.