Por José Luis Taveras
El hombre tacaño, generalmente:
a) Es metódico y organizado; siempre guarda recibos, facturas, vouchers y contratos.
b) Vive sospechoso y a la defensiva, como quien será víctima de una agresión inminente.
c) Es obsesivo con el aseo, el orden y siempre tiene bien lustrados los zapatos.
d) Generalmente lleva una pluma en el bolsillo de la camisa, que nunca la pierde y, si la presta, exige su devolución.
e) Es calculador; sabe las fechas, los días de pagos y los vencimientos de los servicios.
f) Generalmente rechaza las exposiciones sociales, con el temor de que se le pegue algún cargo.
g) Es esquivo, conservador, frío y no se involucra en actividades ni asume compromisos ajenos a su trabajo y a su presupuesto.
h) Si es jefe, sus empleados tienen
expresiones grises y amargadas.
i) Si tiene un vehículo prefiere el japonés (Toyota) o una yipeta con gas.
i) La austeridad lo lleva a ser fiel, aunque envidia calladamente la libertad del hombre bohemio.
k) Es saludable y longevo.