Bartolo García
Dajabón, RD.– En un paso decisivo para reforzar la seguridad en la zona limítrofe, el ministro de Defensa de la República Dominicana, teniente general Carlos A. Fernández Onofre, y el Subsecretario de Defensa de los Estados Unidos para Asuntos del Hemisferio Occidental, Joseph M. Humire, realizaron un extenso recorrido por la franja fronteriza que une Manzanillo con Dajabón.
Durante la visita, ambos funcionarios supervisaron las principales dotaciones militares y recibieron informes detallados sobre los mecanismos de seguridad implementados para combatir el narcotráfico, el contrabando y el tráfico ilícito de personas y mercancías, retos que continúan representando amenazas en la región.
El mayor general Jorge Iván Camino Pérez, comandante general del Ejército, y el general de brigada José Rodríguez Coste, director del CESFRONT, acompañaron la delegación, mostrando en terreno la operatividad de las tropas y las coordinaciones interinstitucionales que se aplican en la zona.
El recorrido permitió al Subsecretario Humire conocer de primera mano la complejidad de la frontera domínico-haitiana, caracterizada por una dinámica cambiante y por desafíos transnacionales que requieren esfuerzos conjuntos entre los dos países.
La presencia de la delegación estadounidense en la zona no solo tuvo un carácter protocolar, sino también estratégico, al reforzar la cooperación bilateral en materia de seguridad y defensa. El mensaje central fue claro: ambos gobiernos trabajan como socios estratégicos para garantizar estabilidad regional.
El ministro Fernández Onofre resaltó que la inversión en equipos, tecnología y personal especializado se complementa con el apoyo internacional, lo que aumenta la efectividad en el control fronterizo. “Cada visita de este nivel ratifica que la República Dominicana no está sola en la lucha contra las amenazas que comprometen la paz y el desarrollo”, afirmó.
Por su parte, Humire destacó la importancia de la coordinación permanente entre los cuerpos de seguridad dominicanos y estadounidenses, subrayando que la seguridad en el Caribe es esencial para la prosperidad común de la región.
Durante el recorrido, se verificaron las operaciones que realizan las tropas del Ejército y del CESFRONT en puntos clave, donde se han intensificado los esfuerzos para impedir la penetración de actividades ilícitas.
El funcionario estadounidense elogió la labor realizada por las Fuerzas Armadas dominicanas y reiteró el compromiso de Washington de acompañar al país en el fortalecimiento de sus capacidades técnicas y operativas.
Las autoridades coincidieron en que la inversión en seguridad fronteriza también genera confianza para el desarrollo económico y social, ya que facilita un entorno más estable para las comunidades que habitan en la línea divisoria.
El encuentro reafirma la visión de que la seguridad no se limita a lo militar, sino que impacta en la calidad de vida de los habitantes, quienes dependen de un comercio formalizado, libre de contrabando, y de un entorno seguro para sus actividades cotidianas.
De esta manera, la cooperación bilateral se proyecta no solo como un mecanismo de control, sino como una plataforma de desarrollo sostenible para ambas naciones que comparten la isla.
La visita concluyó con el compromiso de mantener un calendario de intercambios técnicos y estratégicos, garantizando que el trabajo conjunto entre República Dominicana y Estados Unidos se traduzca en resultados visibles para la seguridad regional.