El beneficio de las seis mayores entidades cae un 23% por las provisiones y el desplome de los ingresos en la banca de inversión
Por MIGUEL JIMÉNEZ
Los grandes bancos estadounidenses se están preparando para la recesión de la posesiones. Los resultados del tercer trimestre de las principales entidades financieras de Wall Street cayeron en el tercer trimestre del año por menores comisiones de banca de inversión y mayores provisiones, aunque la subida de tipos todavía se debió a que otro partido impulsó sus ingresos.
Las seis entidades más grandes de Estados Unidos (JP Morgan Chase, Bank of America, Citigroup, Wells Fargo, Goldman Sachs y Morgan Stanley) ganaron $29.420 millones en el tercer trimestre de este año, un 23% menos que en el mismo período de 2021. La recuperación económica permitió en 2021 liberar provisiones que se habían constituido para cubrir posibles impagos derivados de la pandemia que luego no se materializaron en tal cuantía. Frente a los 4.509 millones liberados en el periodo de julio a septiembre de 2021, el damnificación macroeconómico y las incertidumbres sobre la cambio de la posesiones obligaron a dotar 4.139 millones de nuevas provisiones.
Encima, el negocio de banca de inversión penalizó los resultados de las entidades de Wall Street. Esta misma incertidumbre económica y el desplome de los mercados de renta variable frenó la actividad en los mercados de capitales y los ingresos de banca de inversión (asesoramiento, fusiones y adquisiciones y comisiones por suscripción y colocación de emisiones fijas y de renta variable, principalmente) se redujeron a la medio.
Frente a esto, la banca minorista, las empresas de consumo y la banca de pequeñas y medianas empresas siguen siendo sólidas y el aumento de las tasas de interés impulsa los ingresos.
Los resultados de JPMorgan, el porción más conspicuo de Estados Unidos, reflejan todas estas tendencias. Fueron aceptablemente recibidos por los inversores por exceder las expectativas. El porción más conspicuo de Estados Unidos obtuvo una utilidad de US$9.737 millones en el tercer trimestre, 17% menos que los US$11.687 millones logrados en igual período del año pasado, según informó la entidad en un comunicado. La diferencia se debe en su totalidad a mayores provisiones para posibles incumplimientos. Mientras que en el tercer trimestre de 2021 el porción liberó provisiones netas por 1.527 millones de dólares, este año debió aportar 1.537 millones de dólares.
JPMorgan, sin confiscación, aumentó los ingresos en un 10% a $32.716 millones. Si nos fijamos en el ganancia de intereses (intereses cobrados menos intereses pagados), el incremento fue más espectacular, un 34%, hasta un récord de 17.600 millones de euros. Con los aumentos de las tasas de la Reserva Federal, los bancos comenzaron a cobrar intereses más altos sobre sus préstamos antaño de aumentar las tasas de los depósitos, lo que aumentó ese ganancia. Por otro banda, la pequeño actividad de fusiones y adquisiciones oportuno a la incertidumbre económica provocó una válido caída de los ingresos no financieros. En concreto, los ingresos de banca de inversión cayeron un 47% en el trimestre hasta los 1.713 millones, según el desglose de sus resultados.
Su presidente ejecutante, Jamie Dimon, predijo una recesión en Estados Unidos la semana pasada en Washington y consideró improbable un aterrizaje suave de la posesiones. En el comunicado con el que la entidad presentó sus resultados, Dimon destacó que los consumidores y las empresas se mantienen con buena vitalidad financiera, pero que los riesgos se acumulan. “Aunque esperamos lo mejor, siempre estamos alerta y preparados para los malos escenarios”, concluyó.
Bank of America es el porción que ha capeado las peores condiciones económicas hasta el momento. El beneficio del segundo porción más conspicuo de Estados Unidos cayó un 8% en el tercer trimestre, hasta los 7.082 millones, según desveló la compañía. Las alzas de tasas permitieron que su ganancia de interés se disparara, 24% a $13,765 millones, la signo trimestral más entrada en al menos la última decenio. Esta perfeccionamiento de los ingresos de la banca tradicional y el jaloneo de la intermediación de renta fija permitió a la entidad de Charlotte (Carolina del Finalidad) compensar el incremento de provisiones (provisión de 898 millones frente a la libertad de 624 millones en el mismo trimestre del año aludido) y la Caída del 46% en las comisiones de banca de inversión, de 2.168 millones a 1.167 millones, recogidas en su referencia trimestral.
“Seguimos viendo un válido crecimiento orgánico de clientes en todos nuestros negocios, con una anciano actividad de los clientes que contribuye al crecimiento de los ingresos”, dijo el CEO Brian Moynihan en un comunicado.
Citi ganó $3.479 millones en el tercer trimestre, 25% menos que los $4.644 millones del mismo período de 2021, según informó el porción. Una vez más, las provisiones por damnificación e incertidumbres que afectan a la posesiones fueron esencia. Se pasó de liberar provisiones por 1.162 millones a dotarlas por valía de 370 millones. Su ganancia de intereses total crece un 6% hasta los 18.508 millones de euros, aunque ello se debe al impacto positivo de la saldo de su negocio de financiación al consumo en Filipinas, frente al impacto placa de la saldo del mismo negocio en Australia el año pasado. . pasado.
Al igual que otras entidades, a Citi le fue mucho mejor en su negocio de banca minorista, y especialmente en tarjetas, que en banca de inversión, donde los ingresos cayeron 64% a $631 millones a medida que aumentaba la incertidumbre macroeconómica y la volatilidad seguía afectando la actividad de los clientes. Este negocio bancario es el que está siendo “más afectado por el entorno macroeconómico, con flujos de operaciones reducidos y pequeño apetito por fusiones y adquisiciones”, dijo su presidenta, Jane Fraser.