La Haya, Países Bajos. – La Corte Penal Internacional (CPI) emitió este jueves órdenes de arresto contra el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y el exministro de Defensa Yoav Gallant, acusados de crímenes de guerra y lesa humanidad en la Franja de Gaza. Los jueces también aprobaron una orden contra Mohammed Deif, líder militar de Hamás, considerado fallecido en un ataque israelí en junio, aunque nunca confirmado por el grupo islamista.
Impacto de las órdenes de arresto
La decisión convierte a Netanyahu y Gallant en sospechosos buscados internacionalmente, complicando los esfuerzos para negociar un alto el fuego tras 13 meses de conflicto. Sin embargo, las implicaciones prácticas podrían ser limitadas, ya que ni Israel ni Estados Unidos, su principal aliado, son miembros de la CPI.
Los jueces argumentaron que ambos líderes israelíes privaron intencionalmente a la población de Gaza de recursos esenciales como alimentos, agua, medicamentos, electricidad y combustible. La CPI señaló que Israel no investigó adecuadamente estas acusaciones antes de que se emitieran las órdenes.
Reacciones internacionales
La medida provocó reacciones divididas entre líderes globales:
- Estados Unidos: Rechazó categóricamente las órdenes. El presidente Joe Biden y el senador Lindsey Graham calificaron las acusaciones como “vergonzosas” y “antisemitas”.
- Unión Europea: Josep Borrell, representante de la UE, enfatizó que las decisiones del tribunal deben respetarse.
- Autoridad Palestina: Saludó la decisión como un paso hacia la justicia, instando a los países a cortar relaciones con Netanyahu y Gallant.
- Hamás: Celebró la medida, calificándola como un avance limitado pero significativo hacia la justicia.
- Otros países: Canadá, España, Jordania, Sudáfrica y Francia expresaron su apoyo a la CPI, mientras que Argentina y líderes israelíes criticaron la medida.
Desafíos en la implementación
A pesar de las órdenes, la posibilidad de que los sospechosos sean arrestados es remota, ya que la CPI no cuenta con un mecanismo propio de ejecución y depende de la cooperación de los estados miembros. Netanyahu calificó la decisión como un ataque injustificado contra Israel y reafirmó su compromiso de defender al país.
Contexto
La decisión de la CPI se produce en medio de una escalada del conflicto en Gaza, donde la situación humanitaria sigue siendo crítica. Este paso marca un hito en los esfuerzos internacionales por abordar los crímenes de guerra en la región, aunque su efectividad dependerá de la voluntad de los países para cooperar con el tribunal.
