Por qué no deberías comprar un perro Labradoodle
Los Labradoodle son una raza canina con una historia única y un propósito original que, lamentablemente, ha sido distorsionado con el tiempo. Esta mezcla entre Labrador Retriever y Toy Poodle fue creada para resolver un problema específico: ofrecer un perro guía hipoalergénico para personas con alergias severas.
El origen del Labradoodle: un proyecto con propósito social
El responsable de esta innovadora cruza fue el criador australiano Wally Conron. Todo comenzó cuando recibió la carta de una mujer ciega que solicitaba ayuda urgente. Ella necesitaba un perro guía, pero su esposo sufría alergias a los perros.
Ante este desafío, Conron se propuso encontrar una solución: criar un perro que no activara alergias y, al mismo tiempo, cumpliera con las funciones de un excelente perro guía. Tras tres años de trabajo, concluyó que cruzar un Labrador Retriever con un Poodle era la clave para lograrlo.
El resultado fue un éxito: un perro que combinaba la inteligencia y temperamento del Labrador con el pelaje hipoalergénico del Poodle, ideal para personas con alergias y necesidades especiales.
La explosión del Labradoodle y sus consecuencias negativas
Sin embargo, la historia tomó un rumbo inesperado. Después de que la pareja adoptara un Labradoodle, quedaron dos cachorros sin hogar y parecía que nadie los quería. Ante esta situación, Wally Conron decidió revelar a los medios que había creado un “nuevo perro libre de alergias”.
Este anuncio desató una verdadera fiebre global por criar Labradoodles. La raza comenzó a reproducirse masivamente sin control ni el cuidado adecuado. Muchos criadores amateur y negocios lucrativos comenzaron a cruzar Labradores y Poodles indiscriminadamente, buscando ganancias rápidas.
Problemas de salud y comportamiento en los Labradoodles actuales
El proceso de creación original de Conron tomó años y se basó en la experiencia profesional. En contraste, hoy los Labradoodles nacen con diversos problemas físicos, como debilidad en extremidades y displasia. Pero los mayores desafíos son de índole psicológica, ya que muchos ejemplares no desarrollan un comportamiento equilibrado ni pueden adaptarse a la vida cotidiana.
Por estas razones, expertos y organizaciones serias desaconsejan la compra impulsiva de Labradoodles y recomiendan informarse bien antes de adoptar o adquirir esta raza popular pero vulnerable.
La historia del Labradoodle es un ejemplo claro de cómo un proyecto con buenas intenciones puede ser explotado y generar consecuencias negativas para la salud y bienestar animal.
Fuente | FayerWayer


