¿Alguna vez sentiste desorientación o que tu cabeza o en entorno daban vueltas? Si bien los mareos son bastante frecuentes y en muchos casos pueden parecer inofensivos, no se los debe pasar por alto. Aquí te contamos cuáles son las razones más comunes y cuándo se trata de algo serio:
Qué es el mareo
El mareo surge cuando se producen problemas con el sentido del equilibrio y ubicación, normalmente acompañado por aturdimiento, sensación de desmayo o como si la cabeza y el entorno estuvieran girando. El mareo también suele utilizarse para referir al vértigo, y es una de las causas más frecuentes por la que los adultos visitan al médico.
¿Es grave marearse?
La mayoría de las causas no son graves y mejoran rápidamente. El mareo por movimiento o cinetosis es un problema común en las personas que viajan en automóvil, tren, avión o en barco, mientras que otros casos pueden ser provocados por los sudores fríos, vértigo, náuseas y vómitos. Aquí detallamos otras causas comunes:
1. Migrañas
Cuando la mayoría de las personas piensan en una migraña, rápidamente lo asocian a un severo dolor de cabeza. Pero, en algunos casos puede desembocar en graves mareos. Cuando esto ocurre, se lo denomina mareo asociado a migraña. Los especialistas estiman que aproximadamente 1 de cada 3 personas con migrañas padecen esta condición.
El término médico es Dehiscencia del Canal Superior. Es una abertura anormal del hueso que se encuentra encima del canal superior del oído interno, y provoca que los cambios del sonido y la presión influyan en el oído y se experimente vértigo o mareos.
3. Pérdida de audición
Cuando una persona pierde función en ambos lados en el balance del oído interno, se llama Pérdida o Hipofunción Vestibular Bilateral. Puede ser por reacciones alérgicas a medicamentos, accidentes en la cabeza o envejecimiento. De una u otra forma, también puede ser una importante causa de fuertes mareos.
4. Laberintitis
Es un trastorno auditivo que implica irritación e inflamación del oído. Ocurre después de una infección en las vías respiratorias o en el oído, alergia, o tras consumir ciertos medicamentos. La condición provoca pérdida de equilibrio, mareos y vértigo.
5. Problemas cervicales
Algunas personas experimentan mareos que parecen estar relacionados con problemas en el cuello (columna cervical), que se denominan mareos cervicogénicos. Los pacientes pueden sentirse mareados, aturdidos y con náuseas, ya sea en movimiento o cuando están en reposo.
6. Ansiedad
Si una persona está experimentando ansiedad, es común que también padezca mareos. Por otro lado, sufrir mareos puede producir ansiedad. Quienes atravesaron esta situación la describen como un gran aturdimiento o atontamiento.
Se llama Vértigo Posicional Benigno y se produce cuando se forman pequeñas “rocas” de calcio en el oído interno. Esos cristales de calcio se liberan y caen en otra área dentro de los canales de equilibrio, provocando así, que ciertos movimientos naturales, como el moverse en la cama, causen mareos.
8. Embarazo
La náusea es como una “sensación de mareo”. Las mujeres embarazadas durante su primer trimestre también pueden experimentar náuseas y vómitos, a los que se les denomina náuseas matutinas o del embarazo. Entre el 50 y 90 % de las mujeres embarazadas las padecen.
9. Baja presión arterial
Cuando los niveles de presión arterial son demasiado bajos, puede causar síntomas molestos al ponerse de pie demasiado rápidamente, como mareos, desmayos o, en casos extremos, un shock. Procura controlar tus niveles con regularidad para evitar este problema.
Cuando visitar al médico
Si te mareas fácilmente con cualquier tipo de movimiento, debes consultar al médico. Él querrá asegurarse de que no tienes ningún problema en los oídos internos o cualquier otra parte del cuerpo relacionada con el movimiento. Si tu problema con los mareos es provocado por los viajes, existen medicamentos pueden aliviarlos.