Eugenio Miranda
La edición 93 del clásico de mitad de temporada de las Grandes Ligas contó con un dominicano entre las autoridades del juego
La República Dominicana siempre ha tenido protagonistas durante el Juego de Estrellas, que además de mostrar su talento dentro del terreno de juego, también aportan una chispa especial que hace del evento uno muy divertido.
Y aunque por primera vez desde la temporada 1996 ningún quisqueyano fue elegido entre los titulares del clásico de mitad de temporada de MLB, si hubo muchos que fueron escogidos para venir desde el banquillo o desde el bullpen.
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Aunque no hubo jugadores titulares, sí hubo un titular, pero no en la forma en que los fanáticos esperaban con sus votaciones. El umpire dominicano Ramón De Jesús Ferrer se convirtió el martes en el primero oriundo de ese país en forma parte del cuerpo de árbitros.
El nativo de Monte Plata fue escogido por primera vez en estas funciones y su lugar estuvo en la línea del jardín derecho donde fue uno de los testigos más cercanos de varias jugadas, incluyendo un par de atrapadas fenomenales del cubano Adolis García.
De Jesús Ferrer se hizo acompañar del árbitro del plato Todd Tichenor, en primera Quinn Wolcott, en la intermedia Tripp Gibson, en la tercera Stu Scheurwater y en el jardín izquierdo Ryan Blakney.
Ramón De Jesús, quien ha sido reconocido por los congresistas de su país natal, es el primer árbitro dominicano en accionar en las Grandes Ligas desde que hiciera su debut en abril de 2016.
A sus 39 años, De Jesús también ha ejercido como umpire en la liga invernal dominicana y el año pasado estuvo en un partido de los entrenamientos primaverales junto a su compatriota Félix Neón.
