Con la decisión de ayer, de postergar el Código Penal para la próxima legislatura, los senadores privan a los dominicanos de tener una estructura jurídica acorde a los tiempos que vivimos, afirma la Mesa de Diálogo y Representación Cristiana.
Dicen no entender cómo es que después de veinte años que dicho Código es analizado, es enviado a comisiones y conocido su contenido por gran parte de la población, ahora estamos argumentando que el mismo no se conoce y que debe continuar siendo debatido.
Afirman que al parecer en el Senado reina una “mano extraña”, la cual imposibilito el cuórum reglamentario para el conocimiento y aprobación de tan importante pieza la cual posteriormente iría al Poder Ejecutivo para su promulgación final.
“Si tantas veces nos dicen una cosa y sale otra. ¿Será que en algún momento podremos confiar en alguien? ¿Sería una coincidencia que no pudieron asistir todos los faltantes, justo ayer?, se pregunta el reverendo Nersido Borg Cedeño, presidente de la Mesa de Diálogo, organización representativa de la comunidad evangélica nacional.
Anunciaron que se mantendrán firmes en su lucha a los fines de lograr tener un código que respete la vida y los valores del pueblo dominicano, consagrados en nuestra Constitución y en el juramento de nuestros trinitarios.
Finalmente, llamaron al liderato político nacional a ser coherente y sobre poner los intereses nacionales a la hora de tomar decisiones.