El Grupo de trabajo “Task Force” está haciendo recomendaciones a las autoridades neoyorkinas para combatir el ruido ensordecedor en los vecindarios dominicanos de Washington Heights e Inwood, en el Alto Manhattan.
Sostiene la aplicación de 29 recomendaciones, aplicable para las motos de cross, los fuegos artificiales y altavoces para exteriores, entre otras cosas.
El grupo de trabajo liderado por la comunidad está solicitando a las agencias de la ciudad y a los funcionarios electos del Alto Manhattan que “tomen medidas”. “Ahora es el momento de actuar”, dijo Tanya Bonner, presidenta del grupo.
Entre las recomendaciones figuran: Poner puntos de inspección de manera conjunta entre la policía y los Departamentos de Protección Ambiental (DEP) y Transporte (DOT) en puentes y otros puntos clave para la actividad ilegal de motocicletas y vehículos con mofle ruidoso.
La coordinación de los precintos de Washington Heights e Inwood con otros fuera de las comunidades donde se sabe se almacenan moto cross ilegales para investigar y evitar que esta actividad se practique en la comunidad.
Otras de las medidas contemplan que el Departamento de Parques y el NYPD coordinen mejor los esfuerzos para hacer cumplir las reglas y regulaciones del parque durante el día y la noche para responder a las quejas de la comunidad.
Además, que la policía de Washington Heights e Inwood eficientice la distribución de agentes para responder mejor a los problemas de ruido en áreas con problemas crónicos, por ejemplo, con vigilancia rotatoria de oleadas algunas noches en puntos críticos designados.
Los funcionarios electos deben proporcionar financiamiento para un programa piloto de capacitación comunitaria sobre sensores de bajo costo que miden los niveles de decibelios de ruido y crear un sistema para garantizar que esos lectores se recalibren correctamente cuando sea necesario.
Mayor aplicación de las violaciones de las normas sobre ruido por parte de las pequeñas empresas, incluido el uso prohibido de altavoces y DJ al aire libre.
Apoyo de los funcionarios electos y de la comunidad a dos leyes estatales que abordan ciertos ruidos
Hay que recordar que el sistema de emergencias de la ciudad, 311, recibió casi 90 mil llamadas en el 2020 desde los mencionados sectores quisqueyanos, quejándose del alto volumen por música, ruidos de vehículos, motoras, pleitos, hechos que afectan la calidad de vida, el medio ambiente y hasta la salud mental de muchos, especialmente de envejecientes que viven en la zona.
El reporte indica que en 2020 el Alto Manhattan fue el segundo sector de la ciudad con más llamadas al 311, en ese sentido.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) los ruidos altos producen pérdida auditiva, zumbido en los oídos y enfermedades cardiovasculares.
Por Ramón Mercedes
