La UPV y el Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC) transfieren conocimientos para llevar a cabo investigaciones enfocadas en temas de bioplásticos
SANTO DOMINGO.- Harrison de la Rosa Ramírez, investigador y líder de proyectos de la Universitat Politècnica de València(UPV), presentó a docentes e investigadores del Área de Ciencias Básicas y Ambientales del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC), así como a las empresas presentes, los beneficios del uso de bioaditivos para la formulación de plásticos biodegradables.
Durante el encuentro realizado en el edificio Eduardo Latorre (EL), del cual participaron representantes de empresas productoras de plásticos del país, De La Rosa compartió la aplicación de estos productos para el eficiente desarrollo de bioplásticos a gran escala en el marco de colaboración entre la UPV y el INTEC, en el que ambas instituciones se comprometen a transferir conocimientos para el desarrollo de investigaciones en temas medioambientales.
“Dentro de los retos que presenta la utilización de ciertos Bioplásticos, se encuentra la baja capacidad de estos materiales para emplearse en usos comunes. Un ejemplo de ello es la fabricación de bolsas para empaque y embalaje a través del uso de un bioplástico como el ácido poliláctico (PLA), cuyas características, incluyendo su alta rigidez, dificultan la obtención de bolsas flexibles”, explicó el investigador.
A partir de las investigaciones desarrolladas en la UPV, consideró necesaria la incorporación de aditivos que permitan flexibilizar, proveer de ductilidad al material PLA. “Por tanto, en lugar de utilizar un plastificante (aditivo)de origen no renovable y que es sintético, entonces recurrimos al uso de un bioaditivo. Ese bioaditivo de origen renovable, permitiría mantener las características intrínsecas de biodegradabilidad del PLA, dijo.
En este contexto, los bioaditivos son compuestos que se añaden a los bioplásticos con el fin de modificar sus propiedades o para cumplir con ciertos requisitos de sostenibilidad. Esos bioaditivos se extraen de materias primas que están disponibles en la naturaleza. Como son, la resina de pino y la resina del árbol de melocotónejemplos presentados por De La Rosa y temas de investigación dirigidos actualmente por el doctor Juan López Martínez
El investigador agregó que también se pueden incorporar aceites que se extraen de productos naturales como es el maíz, la soja y la semilla de girasol. “Tenemos sobre la mesa el tema de la resina extraída de la flor de una planta exótica, el cual está en fase de redacción para llevarse a un tema de publicación. Actualmente, esta resina se está intentando incorporar a la matriz polimérica del ácido poliláctico (PLA) y el TPS, que es el almidón termoplástico, para ver cuál es su efecto”, anunció.
“La idea en este caso es llevar los resultados de laboratorio que en un momento se logró en el INTEC a que sea industrialmente viable, y esos trabajos fueron los que Harrison presentó hoy como muestra” expresó Yaset Rodríguez, docente del Área de Ciencias Básicas del INTEC al referirse a los proyectos de bioplásticos realizados por estudiantes de las carreras de Licenciatura en Biotecnología, Licenciatura en Bioquímica y del Área de Ingenierías a partir de fibra de coco y almidón de yuca.
Rodríguez agregó que es necesario esperar los resultados de los análisis realizados en el Laboratorio para Estudios de Ecotoxicología y Biodegradabilidad del INTEC para conocer las aplicaciones de estos bioplásticos.
Colaboración del INTEC y la UPV
Durante una visita de Julio Sánchez Maríñez, rector del INTEC, a la sede de esa universidad en Valencia, España, académicos contemplaron la necesidad de colaborar entre los institutos, centros y grupos profesorales de investigación de ambas universidades, en particular los enfocados en la industria del plástico, en energía, y movilidad y transporte.
Maríñez, acompañado por el profesor del Área de Ingenierías Jorge Miranda, expresó al rector de la UPV José E. Capilla Romá la alta valoración de la academia con respecto a los resultados de sus relaciones, como es el caso de las maestrías con doble titulación en Logística y Gestión de Proyectos que han implementado las universidades a la fecha; a su vez, evaluaron la posibilidad de que profesores del INTEC puedan realizar estudios doctorales en la UPV, así como contar con el asesoramiento en el desarrollo de programas de doctorados industriales.
“La colaboración de la UPV e INTEC surge del interés de promover el uso ecoeficiente de los materiales, de manera que el conocimiento de UPV sea transferido a INTEC, y la experiencia de INTEC sea también transferido a UPV”, expresó De La Rosa, quien recordó que los lazos de colaboración no solo van dirigidos a la transferencia de conocimiento, sino también en el intercambio de estudiantes entre ambas instituciones universitarias.
La Universidad Politécnica de Valencia (UPV) se posiciona entre las 500 mejores universidades del mundo según el ranking de Shangai (Academic Ranking of World Universities -ARWU)- y entre las primeras 400 según el QS World University Rankings. La visita a UPV del año pasado que produjo un acuerdo de colaboración entre ambas instituciones, formó parte de una agenda de visitas estratégicas realizadas por el rector del INTEC, con miras a estrechar los lazos con instituciones europeas a partir del Plan Estratégico 2023-2027.
