La etapa de cambios e incertidumbre, que comenzó en 2020, con una crisis sanitaria seguida de una desaceleración económica a la que se sumó la inestabilidad geopolítica, alimenta el desaliento y la inquietud en muchas personas, aumentando los desórdenes mentales y emocionales y la demanda de ayuda psicológica.
Sin embargo, una de las derivaciones de esta suma de crisis, consistente en la mayor digitalización de la vida, ha aportado herramientas tecnológicas que ayudan a solucionar los impactos psicoemocionales de la etapa postpandemia.
Gracias al acceso masivo a las nuevas tecnologías y a Internet, casi la mitad de la población optaría por combinar las psicoterapias en línea y presencial para tratar el estrés o la depresión, según el estudio ‘360 Well-Being Survey 2022’ de la aseguradora Cigna, relativo a España, pero cuyos resultados podrían extrapolarse a otros países.
Los dispositivos electrónicos y entornos virtuales, utilizados cada vez más para efectuar todo tipo de actividades en línea y a distancia, ofrecen una vertiente terapéutica, cuando se usan con el asesoramiento y del modo adecuados, según SPC.
Los especialistas de esta firma tecnológica destacan la disponibilidad de una variada gama de herramientas tecnológicas para el bienestar psicológico y emocional.
Explican que, si bien el número de casos de trastornos como depresión o ansiedad ha aumentado en los últimos años, muchos de estos casos se viven de puertas adentro en los hogares y son “invisibles” para la sociedad.
Señalan que las tasas de trastornos mentales comunes, como la depresión y la ansiedad, aumentaron en un 25% durante el primer año de la pandemia, sumándose a los que ya sufren casi 1.000 millones de personas, citando el Informe Mundial sobre Salud Mental de la Organización Mundial de la Salud de 2022.
Verónica Catediano, gerente de relaciones públicas y comunicación de SPC y el equipo de especialistas de la firma, proponen una serie de consejos para cuidar la salud mental, mantener el equilibrio emocional y aliviar el malestar psicológico, utilizando los productos de electrónica de consumo más habituales.
Podcasts de psicología
Escuchar las emisiones o archivos de audio de temática psicológica de Internet es una forma estupenda de conocer más sobre nosotros mismos, además de descubrir toda clase de recomendaciones para mejorar nuestra calidad de vida y bienestar personal, según SPC.
Para aprovechar mejor los podcasts, algunos orientados a la divulgación y que exploran conceptos relacionados con la salud mental, y otros que recomiendan prácticas o ejercicios para mantener el equilibrio interno, conviene equiparse con unos buenos auriculares inalámbricos, y escucharlos en un ambiente relajado, desconectando del vértigo diario, según sugieren.
Buenas lecturas digitales
La lectura es considerada como una “gimnasia cerebral” que mantiene la mente activa y nos ayuda a nivel psicológico. Seguir el ritmo de las palabras y comprender lo que se lee ayuda a mejorar la capacidad de nuestra memoria, además de prevenir el deterioro cognitivo relacionado con la edad y reducir el estrés, al ser una actividad relajada, de acuerdo a SPC.
Añaden que uno puede beneficiarse de la lectura por medio de los terminales lectores de libros electrónicos o ‘eReaders’ portables, que pueden utilizarse en cualquier sitio, simulan la tinta de escritura de los libros tradicionales y permiten regular la luz de la pantalla, por lo que se puede tener una confortable “biblioteca de medicina emocional” siempre a mano.
Deporte con asistencia digital
El antiguo lema de “Mens sana in corpore sano” sigue vigente, ya que la actividad física hace que nuestro organismo genere endorfinas, unas sustancias neurológicas que ayudan a regular la ansiedad, además de ayudar a mejorar nuestra autoestima, a medida que nos planteamos pequeños retos deportivos y los vamos superando, según el equipo de SPC.
Aseguran que para esto pueden ser de gran ayuda los relojes inteligentes o ‘smartwatchs’, con capacidad de medir el rendimiento deportivo según la disciplina que se practique, y comprobar el número de pulsaciones.
Estos relojes también permiten medir los niveles de oxigenación, contar los pasos diarios y guiar la respiración.
“Gracias a estas opciones podemos analizar nuestro entrenamiento y ajustarlo a nuestro nivel de práctica, para cumplir de modo progresivo los objetivos que nos marquemos”, puntualizan.
Relajación basada en estímulos
La musicoterapia, basado en la estimulación auditiva mediante melodías agradables y relajantes, emitidas a través de altavoces ‘bluetooth’, se utiliza como apoyo en el tratamiento de trastornos como las afecciones cardíacas, la depresión, el autismo, el abuso de sustancias y el Alzheimer, según SPC.
La cromoterapia, basada en el estímulo visual que ejercen los colores relajantes, aplicando por ejemplo tonos fríos (del verde y azul al violeta) en las luces de la habitación para reducir el estrés, es otra técnica terapéutica que puede beneficiarnos por medio de un soporte tecnológico como la iluminación inteligente, apuntan.
También promueve el bienestar emocional, la aromaterapia, basada en la estimulación olfativa y el uso de extractos naturales de plantas o aceites esenciales, que se pueden aplicar a través de dispositivos humidificadores y difusores de aromas, según esta misma fuente.
Uso racional de las redes sociales
Internet nos permite comunicarnos con personas de todo el mundo, conocer de forma instantánea las opiniones de otros e informarnos de las últimas tendencias en materia de belleza, ocio, turismo e infinidad de áreas, pero también presenta posibilidades negativas para nuestro bienestar, según SPC.
Estar hiperconectados y observar en las redes sociales la “mejor versión”, a menudo completamente irreal, de ‘influencers’ y otros generadores de contenido, puede conducir a algunas personas a la frustración, al compararse con esa “imagen idealizada” que ofrecen esos personajes en el ámbito digital.
Por eso es esencial tener en cuenta aquello que aparece en redes sociales de un modo equilibrado y darle una importancia relativa, evitando asumir estigmas sobre nuestro cuerpo y belleza, y aceptarlos tal como son, sabiendo que unos días los amaremos y otros días quizá no tanto, como promueven movimientos como el Body Neutrality o el Body Positivity, según SPC.
Aunque el uso de las redes sociales ha sido relacionado con desórdenes de la alimentación, la ansiedad y la depresión, también puede ayudar a tratar y prevenir los trastornos mentales, a través de los testimonios en primera persona, podcasts de profesionales y cuentas de ayuda a familiares y amigos de pacientes, que se difunden en este ámbito, añade Cigna.
Una relación equilibrada con la tecnología
El desarrollo tecnológico simplifica nuestra vida, abre nuevas vías de comunicación, nos permite estar en contacto a distancia con nuestros seres queridos o acceder desde cualquier lugar a nuestro entorno de trabajo, pero a raíz de todo lo bueno que conlleva, también puede generar una dependencia excesiva, según Catediano.
Por eso esta experta recomienda incluir, dentro de nuestros lapsos de ocio, algunos momentos que no estén relacionados con la tecnología y que nos permitan disfrutar de una relación mucho más física y directa con nuestro entorno y las personas.
También sugiere desactivar en nuestro dispositivo móvil las notificaciones relacionadas con el trabajo, una vez que haya terminado nuestra jornada laboral.