Miguel Ángel Cid
El panorama político del PRM frente al PLD: retos y estrategias para las próximas elecciones
El tradicional “guiso peledeísta con salsa morada” parece haber entrado en una pausa estratégica para consolidar sus fuerzas. Mientras tanto, en el Partido Revolucionario Moderno (PRM), se debate intensamente sobre las mejores opciones para enfrentar a Leonel Fernández o a su posible sucesor, conocido como “el delfín” o incluso “la delfina”.
La posición de Luis Abinader en el PRM
Hasta ahora, Luis Abinader se perfilaba como el principal candidato dentro del PRM para las próximas elecciones presidenciales. Fue el aspirante en el 2016 y logró resultados destacados para un debutante en la contienda nacional. Sin embargo, su rol pasivo durante la crisis poselectoral de aquel año genera cuestionamientos.
En 2016, decenas de juntas electorales fueron militarizadas, mientras que casos de irregularidades, como votos consumidos por incendios y luego contabilizados sin explicación, marcaron la coyuntura. La duda persiste: ¿cómo se asignaron esos votos? A pesar del caos, no hubo reclamos significativos. Esta situación pone en tela de juicio la actitud de Abinader, cuya naturaleza parsimoniosa, ideal para los negocios, podría no ser suficiente para la política electoral, que exige arrojo y valentía.
Hipólito Mejía: experiencia y desafíos
Por otro lado, Hipólito Mejía enfrenta dificultades con bajos porcentajes en encuestas y una alta tasa de rechazo entre el electorado. Conocido como el “Guapo de Gurabo“, Mejía también responde con rapidez ante críticas, lo que a veces juega en su contra.
Sin embargo, su trayectoria demuestra capacidad para remontar adversidades. En las primarias del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) en 2012, pasó de un modesto 6% a imponerse sobre Miguel Vargas Maldonado, gracias a un crecimiento constante y meticuloso, similar al trabajo de un relojero.
Como candidato presidencial del PRD, Mejía estuvo muy cerca de derrotar a Danilo Medina. De hecho, si Vargas Maldonado hubiera actuado como perredeísta y no como aliado del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), el resultado podría haber sido diferente. En resumen, si a Abinader le falta arrojo, Mejía lo tiene en abundancia.
Escenarios electorales: PRM vs. PLD
Estos antecedentes son claves para entender la dinámica entre los dos grandes partidos dominicanos: el PLD y el PRM. ¿Recuerdan la revancha pendiente desde las elecciones del 2004 entre Leonel Fernández e Hipólito Mejía? Este factor puede influir en las próximas estrategias.
En el partido de gobierno, se especula que varios precandidatos podrían retirarse en cascada para apoyar al delfín o delfina, consolidando así una candidatura unificada. Esto deja claro que el rival principal del PRM será Leonel Fernández o su sucesor, cuyo nombre aún está por definirse.
El reto perremeísta: elegir al mejor candidato para enfrentar al “monstruo morado”
Sea cual sea el candidato del PLD -Leonel, el delfín o la delfina-, el PRM debe decidir con cuidado quién será su mejor representante para la contienda electoral. Fernández enfrenta altos niveles de rechazo, mientras que Margarita Cedeño, posible delfina, representa un perfil opuesto al de su esposo.
Abinader ha sido considerado un aliado cercano a la Embajada estadounidense y a Leonel Fernández, mientras que Hipólito Mejía genera confianza en la oligarquía nacional y mantiene una relación cercana con el presidente Danilo Medina. Ambos exmandatarios conocen las fortalezas y debilidades del escenario político dominicano, al igual que los poderes fácticos que influyen en el país.
Por ello, cada votante del PRM debe reflexionar antes de las primarias de octubre. Competir contra el “monstruo morado” no es tarea sencilla. La decisión debe basarse en quién posee el perfil más fuerte y la estrategia más efectiva para ganar la presidencia.
Miguel Ángel Cid
Twitter: @miguelcid1

