Su labor literaria no se termina en su obra. Ha sido pensador y gestor de nuevas voces en la literatura dominicana, periodista cultura.
José Rafael Sosa
La dedicatoria de la Feria Internacional del Libro Santo Domingo 2024 a Mateo Morrison es un reconocimiento a su contribución al desarrollo cultural y literario de República Dominicana.
Se trata de un merecido homenaje a un hombre cuya vida ha estado dedicada a la poesía, la promoción cultural y el fortalecimiento de la identidad dominicana a través de la literatura.
Mateo Morrison, además de ser un poeta consolidado, es uno de los el gestor culturales dominicanos más importantes, en un multifacético universo que incluye a Jimmy Sierra, Dagoberto Tejeda, Freddy Ginebra, Manuel Rueda, José Mármol, León David, Myrna Guerrero, Claudio Rivera y Viena González Roldán Mármol Fernando Rodríguez de Mondesert, Luis Rivas, Domingo De la Cruz (MANITO), Nereyda Rodríguez, Odalis Pérez, entre muchos otros que no son ahora mismo objeto de atención de este trabajo.
Con casi seis décadas de trabajo creativo y de gestión, la labor de Mateo Morrison ha dejado una huella profunda tanto en la poesía como en la gestión cultural, especialmente a través del Taller Literario César Vallejo, fundado en 1979, que ha formado varias generaciones de escritores.
Nacido el 14 de abril de 1946 en Villa Duarte, Santo Domingo, Morrison creció en un ambiente que influenció profundamente su obra, marcado por una mezcla de compromiso social y amor.
Su poesía se caracteriza por una sencillez y profundidad que lo acercan a lo cotidiano, pero con una mirada crítica y sensible.
Algunos estudiosos, como José Enrique García, lo consideran “un poeta del amor con una sencillez trascendente”, capaz de ver lo extraordinario en lo mundano.
Desde su participación en el Movimiento Cultural Universitario en 1962, ha trabajado incansablemente en la promoción y formación de nuevos talentos literarios.
