París, Francia. – Marine Le Pen, líder del partido de extrema derecha Agrupación Nacional (RN), fue declarada culpable este lunes por un tribunal francés de malversación de fondos europeos, en un caso que ha generado un fuerte impacto en el panorama político de Francia y de toda Europa.
El tribunal dictó una sentencia de cuatro años de prisión para Le Pen, dos de los cuales son de cumplimiento obligatorio, y los otros dos con suspensión condicional. Además, fue inhabilitada para ejercer cargos públicos durante cinco años, con efecto inmediato, lo que significa que no podrá presentarse como candidata en las elecciones presidenciales francesas de 2027.
La decisión judicial representa un duro golpe para la líder ultraderechista, quien había ganado fuerza política tras sus anteriores campañas presidenciales y se perfilaba como una de las principales contendientes para los próximos comicios.
La condena se relaciona con el uso indebido de fondos del Parlamento Europeo, que según la acusación, fueron destinados a financiar actividades del partido Agrupación Nacional bajo la fachada de empleos parlamentarios ficticios. El proceso judicial ha sido objeto de seguimiento tanto en Francia como en la Unión Europea.
Marine Le Pen ha calificado la decisión como “estrictamente política” y denunció una supuesta violación del Estado de derecho. En su primera reacción pública, ofrecida en una entrevista televisada en TF1, afirmó: “El Estado de derecho ha sido completamente violado. Esta es una maniobra para que no me presente en 2027”.
La líder del RN también expresó su indignación por el fallo, asegurando que continuará luchando para demostrar su inocencia. “Esto no se trata de justicia, se trata de impedir que la voz de millones de franceses sea escuchada”, agregó.
Si bien la sentencia implica pena de prisión, aún no está claro si Le Pen cumplirá su condena tras las rejas o si será sometida a otras medidas, como arresto domiciliario o el uso de un brazalete electrónico. La defensa ha anunciado que apelará el fallo.
El caso contra Le Pen y otros miembros del RN surgió de una investigación iniciada por la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude (OLAF), que detectó irregularidades en los contratos de asistentes parlamentarios durante su mandato como eurodiputada.
La Agrupación Nacional enfrenta también sanciones económicas por la malversación, y varios de sus excolaboradores están siendo procesados judicialmente por su implicación en la red de desvío de fondos.
La condena podría generar un reordenamiento dentro del partido, que ahora se ve forzado a replantear su liderazgo y estrategia de cara a las elecciones de 2027. Hasta ahora, Le Pen había sido la figura central y la principal cara visible del movimiento.
El presidente Emmanuel Macron, aunque no se ha pronunciado directamente sobre la sentencia, ha reiterado en otras ocasiones su compromiso con el respeto a las instituciones judiciales y el Estado de derecho.
Varios sectores políticos de izquierda y centroderecha han saludado la decisión del tribunal como “una victoria para la justicia” y una señal clara contra el uso indebido de fondos públicos.
Mientras tanto, el escenario electoral en Francia queda marcado por esta resolución, que altera significativamente las expectativas de los votantes de derecha y deja abierta la carrera hacia la sucesión presidencial.
Marine Le Pen ha sido una figura clave en el auge de los movimientos populistas y nacionalistas en Europa, por lo que esta condena también tendrá repercusiones en otros países donde partidos similares han tomado fuerza.