La Caída del PLD: Cómo el Estado Fue Dominado por Sus Propios Líderes
Juan T H analiza la crisis interna del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y su impacto en el Estado dominicano. Más que una simple derrota política, lo que está en juego es la corrupción y el manejo del erario público que ha marcado casi dos décadas de poder.
El PLD y la “Fábrica de Presidentes”: Corrupción y Poder
El Estado dominicano no solo perdió ante Danilo Medina, actual presidente de la República, sino ante todos los líderes del PLD que amasaron fortunas durante casi 20 años de gobierno. Con pocas excepciones, estos dirigentes se beneficiaron de un sistema que mezcló el desfalco, el robo y la estafa del erario público.
Esta “fábrica de presidentes” no surge por casualidad. Está alimentada por una estructura interna compuesta por obreros, empleados y grupos denominados “intermedios”, “círculos de estudios” o “bases” del partido. Mientras algunos disfrutan de grandes beneficios, otros se disputan los cargos más altos con ferocidad.
El Caso Reinaldo Pared Pérez y la Crisis en el PLD
Resulta sorprendente que Reinaldo Pared Pérez, Secretario General del PLD, presidente del Senado y de la Asamblea Nacional, haya denunciado públicamente que Danilo Medina utiliza recursos estatales para favorecer al ministro de Obras Públicas, Gonzalo Castillo. Pared Pérez, creador del polémico “Barrilito”, acusó a Medina de manipular fondos públicos para impulsar la candidatura de Castillo sin que ninguna institución -ni el departamento anticorrupción, ni el Procurador General, ni la Junta Central Electoral- haya intervenido.
Más increíble aún es la indiferencia de la oposición, la sociedad civil, las iglesias y el sector empresarial, que han minimizado el conflicto como un simple “pleito interno” del PLD. ¿Cómo no va a importar el uso indebido del dinero público? Esta apatía refleja un grave problema de rendición de cuentas en el sistema político dominicano.
Renuncias y Desmoronamiento de la Cúpula
Poco antes, Carlos Amarante Baret renunció con argumentos similares, denunciando la falta de equidad en el proceso de nominación presidencial. Mientras tanto, otros miembros del partido parecen indiferentes o incluso satisfechos con la eliminación de obstáculos internos.
Esta crisis evidencia la desintegración de la élite del PLD y la autodestrucción del llamado “Danilismo”. Líderes que alguna vez se creyeron intocables, como Reinaldo Pared Pérez, Andrés Navarro, Francisco Domínguez Brito y Temístocles Montas, han sido sorprendidos por la estrategia de Medina, quien jugó con cartas marcadas para imponer a su candidato.
El Verdadero Vencedor: ¿El Estado o los Líderes del PLD?
Contrario a lo que muchos creen, el Estado dominicano no ha vencido a estos líderes. Al contrario, ellos han sometido al Estado y lo han puesto a su servicio durante años. Por eso, la lucha interna del PLD no es solo una disputa por el poder, sino una batalla feroz entre quienes controlan la maquinaria estatal y sus recursos.
Esta pugna, descrita como un enfrentamiento entre “caníbales de la política”, revela las profundas heridas del sistema político dominicano y la urgente necesidad de transparencia y rendición de cuentas en el manejo del poder y el dinero público.

