Italia delega en los guardacostas libios los rescates en el Mediterráneo
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Un día de intensas interceptaciones en aguas internacionales
El pasado domingo, siete pateras emitieron una señal de socorro en aguas internacionales frente a Libia, lo que llevó a la Guardia Costera libia a devolver a su territorio a 948 migrantes y recuperar los cuerpos de otros 10 tras interceptar varias embarcaciones. Esta acción marcó un hito para los guardacostas libios, quienes lograron capturar a un gran número de migrantes en un solo día, lo que fue considerado un éxito por parte de Libia, Italia y posiblemente la Unión Europea.
El temor a ser devueltos a Libia
Para los migrantes que huyen por el Mediterráneo central en busca de protección y oportunidades en Europa, el mayor temor es ser devueltos a Libia, donde son recluidos en centros de detención gestionados por las autoridades locales. Estos centros son conocidos por la escasez de comida y los abusos que allí se cometen, según informes de Amnistía Internacional y Médicos Sin Fronteras. Todos los migrantes, independientemente de su género o edad, son encarcelados y acusados de inmigración ilegal.
La situación de las ONG en el Mediterráneo
Las ONG que operan en el Mediterráneo central para rescatar a los migrantes se enfrentan a un panorama cada vez más hostil, especialmente por parte de Italia. Las autoridades italianas han dejado claro su intención de mantener a las ONG al margen de las operaciones de rescate, delegando en los guardacostas libios esta responsabilidad. A pesar de los esfuerzos de las ONG, como el barco Lifeline y el carguero Alexander Maersk, que esperan un puerto seguro para desembarcar a los migrantes rescatados, el Gobierno italiano se muestra reticente a aceptar su llegada.
El aumento de las interceptaciones y las devoluciones a Libia
En lo que va de 2018, por cada dos migrantes que zarpan de Libia, uno es interceptado y devuelto a tierra, según cifras oficiales de la ONU. Esta tendencia se ha acelerado en la última semana, con más de 2.000 personas devueltas a tierra y más de 200 fallecidos en el mar. A pesar de ello, las llegadas a Italia han disminuido significativamente en comparación con el año anterior, lo que refleja un cambio en la política migratoria del país.
La lucha de las ONG por salvar vidas en el mar
Las ONG que operan en el Mediterráneo central, financiadas principalmente con donativos, se enfrentan a obstáculos cada vez mayores para cumplir su misión de salvar vidas en el mar. A pesar de la presencia de buques y aeronaves militares europeos en la zona, las condiciones para las ONG son cada vez más complicadas, lo que pone en riesgo la vida de los migrantes que intentan cruzar el Mediterráneo en busca de un futuro mejor en Europa.
