La señora vio una yipeta estacionada y le gustó. Como desconocía su marca, la china Changan, buscó referencias sobre el vehículo. Se enteró de sus atributos tecnológicos y de seguridad que la impresionaron. Y el visto bueno de un mecánico le dio la confianza para comprarla.
“Compré esa guagua porque me gustó el diseño”, dice a Diario Libre la conductora, quien desde noviembre de 2022 es parte de una lista creciente de personas en el país que están adquiriendo vehículos de marcas chinas, un comportamiento que ha disparado las importaciones.
China ha ido creciendo en la última década en la fabricación mundial de vehículos. El año pasado, concentró el 32 % de la producción global, seguida por Estados Unidos con el 12 % y Japón – otrora puntero- el 9 %, según datos de la Organización Internacional de Constructores de Automóviles.
Aunque el país asiático tiene sus propias marcas, fabrica otras internacionales, que son las de mayor producción.
Desde China se importaban a la República Dominicana un promedio anual de 1,821 vehículos entre 2014 y 2021. A partir de 2022, las cantidades se quintuplican a casi 10,000 vehículos por año, según un análisis compartido a Diario Libre por el Grupo Unido de la Industria Automotriz de la República Dominicana (GUIA-RD), un gremio que concentra a las principales empresas concesionarias.
Por su trayectoria, la tendencia “da señales de que seguirá aumentando, a menos que factores geopolíticos afecten la ecuación”, anticipa Wendy Capellán, directora ejecutiva de GUIA-RD.
Los sensores de reversa, asistentes de pendientes, controles de tracción, pantalla táctil, asientos de cuero, diseño elegante, techo panorámico, motores eficientes y otros componentes que agregan lujo y confort son algunos de los atractivos que valoran los consumidores locales que compran autos chinos en un mercado aún dominado por unidades japonesas, preferidas por su durabilidad y eficiencia en el consumo de combustible.
32%
Participación de China en la fabricación mundial de vehículos en el 2022. Estados Unidos le sigue en segundo lugar.
Los precios también son un factor que incide. Los vehículos fabricados en China tienden a costar aproximadamente un 15 % menos que los producidos en otros países en modelos similares, aunque esto depende del equipamiento y las tecnologías incorporadas, observa Capellán. “China es mundialmente reconocida por ser muy competitiva en términos de los bajos costos de producción”, comenta.
Cuando una yipeta nueva, de marca japonesa, se vende en el mercado dominicano a un precio promedio de 50,000 dólares, una china de gama similar ronda los 40,000 dólares.
Sin embargo, las marcas chinas tienen el desafío de ganarse la confianza de los consumidores acostumbrados a dudar de la calidad de lo “hecho en China”. Además, uno de los cuestionamientos que se plantean en foros digitales es la disponibilidad de piezas de repuesto, lo que genera dudas en algunos compradores.
“Todo vehículo comprado a través de un concesionario local autorizado por la fábrica siempre tendrá garantía de acceso a piezas y repuestos“, garantiza Capellán.
Indica que tradicionalmente la industria automotriz china estaba muy orientada al mercado doméstico o interno de ese país, pero en los últimos años se ha enfocado en los mercados de exportación, “mejorando notablemente sus diseños, seguridad y tecnología”.
“Para penetrar en el mercado europeo -dice-, la industria automotriz china ha tomado medidas para cumplir con las normativas de seguridad y medioambientales de esos países, como las normas Euro NCAP (European New Car Assessment Programme o Programa Europeo de Evaluación de Automóviles Nuevos)”, dice.
En el reino de las motocicletas
El 96 % de los vehículos que llegaron a la República Dominicana desde China entre 2014-2023 eran nuevos y sólo el 4 % usados, en contraste con los procedentes de Estados Unidos, donde la proporción es inversa: el 91 % usados y el 9 % nuevos, según los datos de Aduanas analizados por GUIA-RD.
La combustión a gasolina es la principal, existiendo una pequeña proporción eléctrica. Y las marcas importadas desde China que dominan en el mercado dominicano, en orden de preferencia, son:
- Changan, Chevrolet (que aunque es norteamericana tiene modelos que se fabrican en China), Shineray, JAC, Dongfeng, Forland, Chana y JMC, entre otras.
Si se excluyen las motocicletas y otros vehículos de uso deportivo, industrial o de carga, entre 2014 y mayo de 2023 se importaron 28,247 vehículos nuevos de origen chino y 650 usados, siendo a partir de 2021 cuando se comenzó a incrementar. El 34 % de las unidades son yipetas y el 27 % son furgonetas.
Pero es en el renglón de las motocicletas donde China tiene una parte importante del creciente parque vehicular dominicano, que al cierre de 2022 ascendía a 5,463,996 unidades en total, según la Dirección General de Impuestos Internos (DGII). De ese total, el 56.1 % son motocicletas.
Desde 2017 hasta 2023, se importaron 664,596 motocicletas desde China, con un promedio anual de aproximadamente 94,942, reporta GUIA-RD, basándose en datos de Aduanas.
En los primeros cinco meses de 2023, el 80 % de los motores provino de China, el 18 % de la India y Japón quedó relegado al tercer lugar con apenas el 2 %.
Las marcas de motocicletas más importadas desde China, en orden de cantidad, son:
- Tauro, Loncin, Supergato, X1000, Haoujue, Nipponia, Kymco y Gacela, entre otras.
“Una de las razones por las cuales las motocicletas chinas han logrado ese nivel de penetración en el mercado está relacionada con el factor precio“, dice Capellán.
Los precios en el mercado local varían según la marca y el modelo. Una motocicleta nueva, fabricada en China, de una de las marcas más vendidas, puede costar alrededor de 1,800 dólares. Otras usadas se venden entre 60,000 pesos (1,070 dólares) y 90,000 pesos (1,600 dólares).
80%
Porcentaje de motores provenientes de China en los primeros cinco meses del 2023.
Motores chinos en programa del Gobierno dominicano
En el mercado también se reciben motocicletas chinas desensambladas y se arman en el país. De hecho, las unidades asiáticas son las que el gobierno ha incluido en el programa Motoristas Beneficiarios (Motoben) para transformar y organizar el servicio de motoconcho.
Ya se han realizado dos ferias internacionales de micromovilidad sostenible. En la última, los motoristas pudieron elegir una unidad eléctrica con financiamiento del Consejo Nacional de Promoción y Apoyo a la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Promipyme) a una tasa fija del 1 %.
Los precios de los motores oscilan entre 1,600 y 2,600 dólares, pagaderos en tres años. En la primera feria se vendieron 300 mototaxis eléctricos; en el primer día de la siguiente hubo 276 solicitudes y en el segundo casi 400, informa Margarita Rodríguez, directora de Motoben.
“Un mototaxista que decide pasarse a lo eléctrico se ahorra 10,500 pesos mensuales sólo en combustible”, estima Rodríguez.
A pesar de la preferencia por los motores chinos, la directora ejecutiva de GUIA-RD señala que en el sector de las motocicletas la inversión en investigación y desarrollo es escasa y suele estar liderada por las grandes marcas privadas ya establecidas, que tienen un diseño original patentado y reconocido.
“Esto significa que gran parte del resto suelen ser lo que conocemos como marcas blancas, que utilizan modelos ya desarrollados y que se fabrican con una amplia variedad de componentes de diferente durabilidad y a menor precio, aunque obviamente eso implique una calidad diferente”, analiza.
“Definitivamente, China merece atención”, afirma.
