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Policías de la Autoridad Portuaria de Nueva York y Nueva Jersey, capturaron ayer martes a las 8:15 de la mañana en el aeropuerto internacional John F. Kennedy, cuando esperaba abordar un vuelo para huir a la República Dominicana  al dominicano Domingo Berroa, de 32 años de edad y buscado por el asesinato de la mexicana Wendolin Ortiz, de 19, en el  restaurante – lounge ilegal “MIXTEC”  en la avenida Jerome cerca de las calles North y Kingsbridge Road el lunes en la mañana.

Altice

Berroa, fue arrestado 24 horas después del asesinato en el que cayó la mexicana que había sido baleada en una rodilla el 20 de junio en otra balacera entre dominicanos en las afueras del parque Clermont en El Bronx y  cuatro hombres heridos.

Berroa, fue sacado de la terminal 4 en el aeropuerto donde se abordan los vuelos a la República Dominicana y llevado al cuartel 44 en El Bronx, donde se le interrogó y es acusado por asesinato y posesión criminal de un arma.

El acusado reside en el sector Woodlawn en El Bronx, y la policía dice que un sospechoso de participar en el tiroteo huyó de la escena a bordo de un carro Acura con placa de Nueva Jersey, pero se cree que era Berroa.

Detalles sobre el perfil del dominicano acusado no han sido divulgados y este reportero obtuvo anoche una foto del rostro de Berroa.

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Anoche, la destrozada madre de la víctima, Sonia Martínez, dijo que los detectives de homicidios le aseguraron que su hija, que se había graduado de bachiller en la Escuela Secundaria  Satellite Academy High School, no era el objetivo de Berroa que al parecer, se enfrentó a tiros con otros hombres y dos de ellos, salieron levemente heridos.

La mexicana y los heridos fueron llevados al hospital Saint Barnabas en El Bronx, donde la mujer fue declarada muerta.

Ortiz, aspiraba a estudiar belleza y abrir su propio de negocio de estilismo.

En una foto subida a las redes sociales, aparentemente por personas que participaron en la fiesta donde ella fue asesinada y había unos 30 asistentes, aparece un hombre como recostado encima de las piernas de la mexicana.

Su padrastro, Eli Alpacata, dijo el lunes en la noche a medios locales que su hijastra estaba saliendo con un promotor que frecuentaba el negocio ilegal, mientras testigos que residen en la cuadra, aseguraron que el establecimiento fue abierto a las 3.50 de la madrugada.

La señora Martínez, entre sollozos relató que su hija le informó que iba a “salir” y que regresaría a la casa, pero la progenitora le pidió que no lo hiciera.

“Ella estaba sentada en una mesa cuando comenzaron los disparos”, dijo la madre.

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La policía dijo que la mexicana recibió un tiro en el torso, un hombre de 28 años una herida de bala en el brazo derecho y otro sujeto de 30 años  tres balazos  en el cuerpo.

Un tercer hombre se salvó de un balazo cuando una bala perdida impactó su carro estacionado, momentos después de que él había salido del vehículo.

Los dos hombres heridos seguían estables en el hospital al cierre de esta crónica.

Ortiz, residía en el edificio 312 de la calle 163 Este en El Bronx.

El padrastro de la joven le dijo al tabloide  Daily News ayer  martes que se sintió alentado por la rapidez de la captura de Berroa, incluso cuando la familia de Ortiz ha sido destrozada por la muerte de su hijastra.

“Lo atraparon en el aeropuerto, estaba listo para huir”, dijo el padrastro Ely Alpaca, de 45 años, que trabaja como plomero.

“Estamos saliendo pero todavía estamos lidiando con los arreglos de su funeral. Queremos saber por qué y queremos que el club sea cerrado”, exigió el padrastro.

Un tercer hombre esquivó una lesión cuando una bala perdida alcanzó su auto estacionado momentos después de que él había salido.

No se reveló de inmediato si Berroa  había apuntado a Ortiz.

Por Miguel Cruz Tejada

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