Baret también estuvo dirigiendo el Ministerio de Interior y Policías
De naturaleza perfectamente amoral, sínica y simuladora, se vendió como una persona diferente en la administración del licenciado Danilo Medina Sanchez, dicen sus compueblanos de la ciudad de Moca que andaba en un simple motor honda 50 por las calles de esa ciudad y luego compro según se rumora hasta helicópteros a cada uno de sus hijos, dispendio sin miramiento los recursos del ministerio de educación y autoridad portuaria, y formo varias compañías de testaferros en el Cibao y en la capital, falsos suplidores, compañías que localizaban terrenos para las construcciones de liceos, escuelas y canchas sobrevaluadas diez veces sobre su valor original, perdiendo el Estado Dominicano por ende el pueblo, miles de millones de pesos, se comenta que todos los suplidores eran testaferros encubiertos en su gestión y que el dirigía personalmente esa camorra de pillos, malandrines y villanos.
Nada que se oculte bajo el sol de esta tierra puede ocultarse, Carlos Amarante Baret por donde paso, según el rumor público, fue un ciclón batatero, Este hombre de cara pálida, pretendiendo ser educado, discapacitado, que conocía todos los secretos del Partido de la Liberación Dominicana y de su tendencia la del Lic. Danilo Medina Sanchez, se encubrió en su problema físico para cometer todas las diabluras y truchimanerias en el ministerio público, se auxilios de ¨PRESTIGIOSAS¨ compañías en el Cibao y Santo Domingo, donde alquilaron cientos de naves de la zona franca para desde ahí almacenar hasta desde una barra de tiza, pizarrones, pupitres y material gastable para suplir el ministerio de educación donde se pagaban mensualmente millones de pesos a sus compañías de testaferros.
Nadie se iba a imaginar que este hombre que vendía una figura impoluta, de seria moralidad, de elevados ideales boschistas, iba a crear la coraza para inventar todos tipos de fechorías y sobrevaluaciones, donde se destacaron a nivel nacional a comprar todos los terrenos para la construcción de muy mala calidad de cientos de escuelas y liceos, para adjudicársela a sus compañías de testaferros y a sobrevaluaciones millonarios de los terrenos ubicados en todo el territorio nacional.
Jamás nadie se podría imaginar que ese hombre llamado licenciado Carlos Amarante Baret iba a poder acumular una fortuna sin precedente y no cuantificada con esas compañías de testaferros muy conocidas a nivel del Cibao con sede en Santiago de los 30 Caballeros y de la capital del distrito nacional, por donde paso esas hordas de asociaciones de malhechores y lo más sorprendente es que el ministerio de la procuraduría general de la República y el Peca no, comiencen a llamar a los cabecillas de este entramado de enorme corrupción y a las compañías que están involucrados hasta la saciedad en esta orgia de cogioca al estado dominicano por ende al pueblo y esta hemorragia de corrupción en la administración de este señor.
La audacia de este señor se observa en sus transformaciones, tanto más interesante porque se presentaba como un hombre de un verbo cervantino, una conducta intachable y ahora presenta una dualidad en su metamorfosis, como una persona bipolar, carencia de moral y de carácter de suma degradación, de naturaleza maquiavélica, y fucheciana, el más perfecto de los simuladores, juntos a compañías millonarias que venden una imagen a la sociedad y son como una batata muy hermosa por fuera y rellena de piogan por dentro, el pueblo dominicano espera, la auditoria en ambas gestiones donde paso este huracán David devastador y destructivo, por toda la administración pública.
Por William Reyna Rivas
