Abuelita dominicana: la vida en Nueva York
Lidia Jiménez y su decisión de quedarse en la Gran Manzana
La señora Lidia Jiménez, de 86 años, comparte su amor por Nueva York y explica por qué prefiere vivir en la ciudad a pesar de las dificultades de la edad.
Más oportunidades en la Gran Manzana
Jiménez destaca las oportunidades que encuentra en Nueva York, donde cuenta con el apoyo de familiares, médicos y servicios de salud para enfrentar sus múltiples enfermedades crónicas.
Retos de la tercera edad en la ciudad
La abuela dominicana enfrenta desafíos de salud como hipertensión, colesterol alto, osteoporosis y artritis, que le causan dolor y dificultades para moverse.
Apoyo crucial para los ancianos
Su esposo, Alcides Jiménez, de 88 años, también enfrenta problemas de salud y depende de cuidadores profesionales para sobrellevar su condición, incluyendo Alzheimer y cirugías cardíacas.
Asistencia médica en Nueva York
Profesionales de la salud como la enfermera Alicia Schwartz brindan apoyo integral a ancianos latinos en la ciudad, facilitando su acceso a terapias físicas, cuidados personales y atención médica.
Desafíos de salud en la comunidad latina
Datos del Departamento de Envejecientes de la Ciudad de Nueva York revelan altas tasas de enfermedades crónicas y discapacidades entre la población latina de la tercera edad, con casos como el de Mario Ortiz, quien ha enfrentado múltiples cirugías debido a hipertensión y diabetes.
Superando obstáculos con Medicaid
A pesar de los desafíos de salud, Lidia Jiménez y su esposo pueden costear sus tratamientos médicos gracias al Medicaid, lo que les permite mantener una calidad de vida aceptable a pesar de las dificultades.
la historia de Lidia Jiménez y otros ancianos latinos en Nueva York destaca la importancia del apoyo familiar, la atención médica especializada y los programas de asistencia para garantizar una vejez digna y saludable en la Gran Manzana.
